Madrid, aspiradora económica
Suma el 44% de las mayores empresas
La difícil gestión de la pandemia ha sacado a flote tensiones financieras dentro de las comunidades autónomas y también, entre ellas. La presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP) reclama para la capital un apoyo especial «por ser motor económico, por tener el 60% de las grandes empresas, por la movilidad y por la densidad de población». Por su parte, desde la Comunidad Valenciana, su presidente, Ximo Puig, denuncia que el efecto capitalidad ha convertido a Madrid en un «aspirador» de recursos, población, funcionarios estatales, grandes empresas, organismos, empleados cualificados y redes de influencia en detrimento de otras comunidades que ahora, sobre todo, se ven limitadas para encarar las dificultades sanitarias y económicas derivadas del covid.
Durante años, los territorios han denunciado la competencia desleal que generan las rebajas fiscales de unas autonomías frente a otras. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en su anterior condición de consejera de Hacienda de Andalucía censuró con insistencia el dumping fiscal (competencia desleal) practicado por Madrid; es lo mismo que han denunciado los Ejecutivos de Aragón, Asturias, Castilla La Mancha, todos ellos de actual signo socialista, y también ha sido criticado por el Govern de Cataluña, de corte nacionalista.
«Madrid puede permitirse dejar de ingresar 4.100 millones anuales con rebajas fiscales fruto de su dopaje por el efecto capitalidad», resolvió Ximo Puig este martes en el Parlamento autonómico. Durante su intervención, el presidente esgrimió los datos de un revelador informe elaborado por el Laboratorio de Análisis de Políticas Públicas (IvieLAB, vinculado a la Generalitat valenciana) que, bajo el título Madrid: Capitalidad, economía del conocimiento y competencia fiscal, aporta multitud de datos sobre los efectos que el protagonismo madrileño causa en el resto de las economías regionales. «La comunidad de Madrid ha optado por competir fiscalmente con el resto de las comunidades por la localización de las bases tributarias y la domiciliación de sus titulares», se afirma en el estudio dirigido por Francisco Pérez y Ernest Reig, ambos del Ivie y catedráticos en la Universidad de Valencia.
El informe analiza la movilidad de asalariados y pensionistas entre autonomías desde el año mayores empresas del país y el 21% de las ocupaciones cualificadas de España. Además, el porcentaje de población con estudios universitarios es notablemente superior en Madrid que la media española (40,9% frente al 30,8%) y el peso de la ocupaciones de alta cualificación y salarios alcanza un nivel del 45%, al que solo se acerca Barcelona. El resto de comunidades quedan muy lejos de las dos grandes.
«El poder de decisión económica que se concentra en la capital es abrumador», concluye el informe. «En la Comunidad de Madrid se produce una alta concentración de directivos y gerentes y de los órganos de decisión de las grandes empresas, siendo frecuentes las relaciones entre las personas que conforman estos colectivos y también de las mismas con quienes adoptan importantes decisiones en los poderes públicos», se añade. 1955
PESO DE LAS GRANDES EMPRESAS RESPECTO DEL TOTAL DE ESPAÑA