¿Qué dice el dictamen de la ONU?
El dictamen del Comité de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad es muy claro y contundente: España violó el derecho a la educación inclusiva de un niño leonés con síndrome de Down que fue enviado a un centro de educación especial por las autoridades nacionales a pesar de la objeción de sus padres.
Las autoridades españolas «no evaluaron los requerimientos específicos del niño» y «no adoptaron medidas razonables que pudieran haberle permitido permanecer en la educación ordinaria» pese a las obligaciones al respecto establecidas en la convención incultades sobre derechos de personas con discapacidad, subrayó el comité en un comunicado.
El caso concierne a un chico llamado Rubén, hoy mayor de edad pero que tenía 11 años en 2009, año hasta el que según la investigación del comité había mantenido buenas relaciones con sus compañeros de clase y maestros en una escuela ordinaria de León, donde contaba con un asistente de educación especial. Ese año, en el que Rubén comenzó el cuarto curso, la situación comenzó a deteriorarse, se denunciaron presuntos malos tratos por parte de su maestro, el alumno comenzó a mostrar difizonable en el aprendizaje y en la vida escolar y un informe del centro mencionó un «retraso en el desarrollo asociado al síndrome de Down» del niño. En junio de 2011, la Dirección Provincial de Educación autorizó la matriculación de Rubén en un centro de educación especial a pesar de la objeción de sus padres, señala en un comunicado del comité de Naciones Unidas.
Los padres de Rubén recurrieron sin éxito la decisión de las autoridades educativas y denunciaron posibles abusos que no fueron investigados, por lo que elevaron el caso ante el comité de la ONU en 2017. Tras examinar las alegacioternacional nes presentadas por ambas partes, el Comité llegó a la conclusión de que España violó el derecho de Rubén a la educación inclusiva, concluye el comunicado.
«No parece que las autoridades hayan realizado una evaluación rao un estudio profundizado y pormenorizado de las necesidades educativas de Rubén», detalla el miembro del comité Markus Schefer.
El organismo solicitó a España que garantice que Rubén, actualmente en un centro privado de educación especial, sea admitido en un programa de formación profesional inclusivo, que se le conceda una indemnización y se investiguen efectivamente las denuncias de abuso. También insta a España a que elimine toda segregación educativa de estudiantes con discapacidad, y a que garantice que no se persiga penalmente a los padres de los estudiantes con discapacidad por exigir el derecho de sus hijos a la educación inclusiva.