Nuevo conflicto entre Hungría y Europa
El primer ministro pide la dimisión de la vicepresidenta Jouroba
Es conocida la oposición de Hungría al reparto obligatorio de refugiados, sus continuos desencuentros con Bruselas a cuenta del control del sistema judicial y los medios de comunicación y la negativa a vincular el respeto del estado de derecho y el nuevo presupuesto europeo que negocian con muchas dificultades los Veintisiete. A todo esto se sumó ayer un nuevo frente abierto por el primer ministro, Viktor Orbán.
En una carta para la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el dirigente húngaro reclama la destitución de la vicepresidenta Vera Jourová y anuncia la «suspensión de todos los contactos bilaterales» con la responsable de Valores y Transparencia.
El Ejecutivo comunitario ha dejado claro que Jourová trabaja estrechamente con la presidenta Ursula von der Leyen, que la checa cuenta con su «plena confianza» y que las preocupaciones de Bruselas respecto a Hungría son de sobra conocidas.
Detrás de este nuevo ataque frontal de Orbán a Bruselas se encuentran unas declaraciones realizadas por la comisaria checa el pasado fin de semana a la revista Der Spiegel. «Al señor Orbán le gusta decir que está construyendo una democracia iliberal... Yo diría que está construyendo una democracia enferma», criticó Jourová. Estas palabras provocaron una airada reacción del Gobierno.
«Vera Jourová tiene que dimitir. Ninguna institución democrática debería tolerar una líder que utiliza insultos como lo hizo en su entrevista en Spiegel. Definir a Hungría como una democracia enferma humilla al pueblo húngaro, contradice los valores europeos y avergüenza al pueblo», arremetió el lunes la ministra de justicia húngara, Judit Varga, en su cuenta de Twitter. «Solo está cumpliendo con sus funciones como vicepresidenta de Valores y Transparencia. Cualquier tipo de presión o chantaje por parte de un gobierno es inaceptable», criticó la líder de los Socialistas y Demócratas en la Eurocámara, Iratxe García.