Un debate nada presidencial
Las interrupciones constantes y los ataques marcan el primer cara a cara Los primeros sondeos dan como ganador al candidato demócrata
evidencia los peligros que acechan al país en estas elecciones, en las que muy probablemente no habrá resultado tras la noche electoral debido al aumento masivo del voto por correo y los planes de algunos estados para recontar esas papeletas después del 3 de noviembre.
Nuevamente Trump no quiso comprometerse a aceptar el dictamen que salga de las urnas o a esperar si quiera a que la comisión electoral certifique el resultado antes de cantar una victoria. «Esto no acabará bien», llegó a decir tras reiterar que habrá «un fraude masivo» en el voto por correo y pedir a sus seguidores que acudan a las urnas a vigilar la jornada electoral. preocupado en interrumpir a su rival que en exponer porqué debería ser reelegido. Llamó a Biden «socialista» a las primeras de cambio, se mofó de su inteligencia y describió sus logros con brocha gorda. «He hecho más en 47 meses de lo que hiciste tú en 47 años», le dijo al demócrata. En ningún momento trató de apelar a los pocos indecisos que quedan a estas alturas. Ni siquiera a la legión de mujeres que le están abandonando en las encuestas.
Biden apenas pudo terminar una sola intervención sin ser interrumpido. Y acabó saliéndose de sus casillas. «Te quieres callar, hombre. No se puede ser menos presidencial», le espetó. «Es difícil decir una palabra con este payaso», dijo en otra ocasión. O «no estoy aquí para poner en evidencia sus mentiras, todo el mundo sabe que es un mentiroso”.
Donald Trump CANDIDATO REPUBLICANO
«He hecho más en los últimos 47 meses de presidente de lo que has hecho tú en 47 años»
Joe Biden
El demócrata trató de comportarse como el único adulto en la habitación. Lleva ventaja en las encuestas y le bastaba con demostrar que no ha perdido sus facultades mentales, como insiste constantemente Trump. Superó el examen con holgura, por más que haya perdido reflejos y recurra al exabrupto cuando se siente acorralado. Sus intervenciones sobre la gestión de la pandemia y la crisis racial fueron de lo mejor. Los primeros sondeos le dieron ganador.
Trump acusó al hijo de Biden. Hunter, de corrupción o de ser un cocainómano y se mofó cuando hablaba del servicio en el Ejército de su primogénito Beau, fallecido por un cáncer a los 46 años. Biden le llamó «racista», dijo que es la «mascota de Putin» y reiteró que no tiene ningún plan para sacar al país del desaguisado de la pandemia, que ha dejado más de 200.000 muertos. «Este es el mismo hombre que dijo que para pri