Los periodistas mexicanos claman contra los asesinatos
La última víctima es la informadora de televisión Lourdes Maldonado
Los periodistas mexicanos, con tres asesinatos a sus espaldas en lo que va de año, han dicho basta. El asesinato de dos reporteros en Tijuana en la última semana ha colmado el vaso y puesto sobre la mesa la cuestión de la protección de los profesionales de los medios de comunicación en México, el país sin conflicto bélico más peligroso del mundo para los reporteros, con un centenar de homicidios en 20 años. Las organizaciones de periodistas convocaron ayer manifestaciones en Tijuana y en una veintena de ciudades bajo el lema Ni silencio ni olvido. «Hacemos un llamamiento a las autoridades mexicanas para que refuercen la protección de los periodistas», expresó el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en un comunicado.
La periodista de televisión Lourdes Maldonado, asesinada a tiros el domingo, y el fotoperiodista Margarito Martínez, muerto a tiros seis días antes, habían solicitado formar parte del Mecanismo de Protección habilitado por el Gobierno desde 2012. Este mecanismo de protección para defensores de los derechos humanos y periodistas cubre actualmente a «496 periodistas, de los cuales 137 son mujeres y 359 hombres», puede leerse en la web del Gobierno federal. El dispositivo prevé una estrecha protección policial y cámaras de vigilancia domiciliaria, recuerda Jorge Carrasco, director del semanario Proceso. Este periodista de investigación se benefició de ella en 2013 tras recibir amenazas de muerte por la investigación del asesinato de uno de sus colegas, y refugiarse durante unas semanas en París.
«En mi caso funcionó», explicó Carrasco para añadir: «Pero desde entonces, el mecanismo ha sido superado. Ha habido muchos casos». Carrasco también señala la «falta de compromiso» de otras instituciones (Parlamento, poder judicial...). «Los gobiernos de los (32) estados no han participado», dijo. México es un Estado federal.
«Está claro que este mecanismo no funciona», explicó Sonia de Anda, reportera en Tijuana. El fotógrafo asesinado en Tijuana había pedido protección en diciembre por sentirse amenazado. Nunca recibió una respuesta. La periodista Lourdes Maldonado, asesinada en su coche, iba escoltada por la policía cuando caminaba. «Evidentemente, el domingo por la noche no había policías», lamentó De Anda. La representante de Reporteros Sin Fronteras en México (RSF), Balbina Flores, lamentó que la solicitud de protección del fotógrafo de Tijuana se haya perdido en el papeleo.
Instalada en Tijuana desde los años 90, Lourdes Maldonado había solicitado directamente en 2019 la protección del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, alegando que «temía por su vida». Su muerte ha causado una gran conmoción. El presidente López Obrador dijo que ha ordenado investigar «a fondo» el crimen.