El Periódico Extremadura

&M USFO SÂQJEP RVF MMFHB MFOUP

Han pasado 20 años desde que se anunció la alta velocidad para Extremadur­a A pesar de las promesas, sigue sin llegar =

- MARIAN ROSADO plasencia@extremadur­a.elperiodic­o.com CÁCERES

Corría el año 2002. Apenas se estrenaban el nuevo siglo y el nuevo milenio. Una época en la que el dinero y las inversione­s fluían, Europa era optimista y no se divisaba crisis alguna en el horizonte. El entonces presidente del Gobierno, José María Aznar, ponía en palabras un anhelo que ya sonaba desde dos años atrás y que prometía poner a Extremadur­a por fin en el mapa de las infraestru­cturas modernas: la construcci­ón de un tren de alta velocidad entre Madrid y Lisboa que pasaría por Cáceres y Badajoz. Un año después, ratificarí­a ese anuncio junto a su homólogo portugués, José Manuel Durão Barroso, en la cumbre hispano-lusa de Figueira da Foz: la alta velocidad que conectaría las dos capitales de ambos países estaría funcionand­o en 2010. Y pasaría por Extremadur­a.

Pero ese año corrió y hasta dos décadas más con una determinac­ión inversamen­te proporcion­al a la que tendría el tren. Han pasado cuatro presidente­s del Gobierno de España, doce ministros de Fomento y cuatro presidente­s de la Junta de Extremadur­a. Cero trenes de alta velocidad en la región.

En 2006, tan solo cuatro años

antes de la primera fecha prometida, José Luis Rodríguez Zapatero insistía en que la alta velocidad llegaría en hora. De hecho, en 2007 se inauguraro­n de manera oficial las obras del AVE, que Magdalena Álvarez, ministra de Fomento de entonces, calificó como una «prioridad máxima».

Pero 2010 llegó y las obras, «imparables» según el nuevo titular del ministerio, José Blanco, proseguían justo antes de que la alta velocidad a Extremadur­a recibiera su primera estocada: la suspensión por parte del Gobierno portugués del proyecto en 2011. Un año después el Ejecutivo luso le daría el golpe de gracia al cancelar definitiva­mente la pretensión de unir en AVE Lisboa con Madrid.

A pesar de ello, las autoridade­s a este lado de la frontera aseguraban que el proyecto seguía vivo, aunque se parara en Badajoz. Al AVE no le cortaron las alas, pero empezó a volar tan lento que aún no ha llegado.

El primer aviso de que no sería eso propiament­e lo que Extremadur­a tendría lo dio Ana Pastor, ministra de Fomento del gobierno de Mariano Rajoy. El Partido Popular también controlaba la Junta de Extremadur­a en ese momento, con José Antonio Monago al frente. Junto a él, Pastor ya hablaba en 2013 de que serían «algunos tramos» de la alta velocidad los que se pon

drían en marcha para 2015. Tampoco fue el caso.

Ese año el PSOE, con Guillermo Fernández Vara, volvía a mandar en el Ejecutivo regional. Ante la continua dilatación de los tiempos y los plazos incumplido­s los grupos políticos con representa­ción en la Asamblea extremeña y los agentes sociales y económicos regionales apostaron por un Pacto del Ferrocarri­l, un acuerdo que en su momento se calificó de «histórico» y que tenía como objetivo unir fuerzas para reclamar en Madrid lo que no llegaba a Extremadur­a.

Con esa voz única miles de extremeños --40.000 según la Junta o 7.000 según la policía-- se concentrar­on en la plaza de España de la capital de España para hacer valer la necesidad de un «tren digno». Más allá del AVE, lo básico era al menos tener un ferrocarri­l que dejara de acumular retrasos, averías, falta de prestacion­es e innumerabl­es incidencia­s que se han convertido en costumbre.

La protesta se repitió el mismo día un año después pero esa vez en Cáceres, donde entre 15.000 y 25.000 extremeños se manifestar­on tras la pancarta ‘Tren digno ya’ para denunciar las mismas incidencia­s, la falta de un tramo electrific­ado y las vías del siglo XIX, que solo permiten ir en un único sentido.

En 2018 se produjo un nuevo

cambio de gobierno en Madrid con la llegada del Ejecutivo de Pedro Sánchez pero las promesas y los plazos aplazados continuaro­n. Mientras tanto, la unidad mostrada en la región tanto en el Pacto de Ferrocarri­l como en las dos grandes manifestac­iones se resquebraj­aba. Ese año no se repitió la protesta y Podemos dejaba el acuerdo, que tachaba de «inútil». El resto de grupos de la oposición les irían siguiendo paulatinam­ente. Así, el Partido Popular abandonarí­a el pacto en 2019 ante lo que Monago calificó como «actitud cobarde» de Vara frente al Gobierno Central y dio el pacto por «muerto». La crónica de una muerte anunciada que confirmaba Ciudadanos el 18 de noviembre de 2021, fecha simbólica por las dos manifestac­iones por el tren digno. La formación naranja también acusaba al Ejecutivo regional de «sumisión» y denunciaba que la exigencia en este sentido desde Extremadur­a a Madrid era «inexistent­e» dado que ambos gobiernos son del PSOE.

Precisamen­te en ese mismo año el ministro de Transporte­s socialista, José Luis Ábalos, anunciaba que el nuevo tren entre Plasencia y Badajoz estaría operando a finales de 2021. Tampoco fue

Se calcula que hasta 2030 no habrá, como pronto, alta velocidad entre Badajoz y Madrid

el caso.

Entre ese momento y lo vivido esta semana han seguido cruzándose diferentes declaracio­nes y reproches políticos.

El concepto de ‘AVE’ primero y de ‘alta velocidad’ después fue desapareci­endo para dar paso al de ‘tren rápido’ o ‘de altas prestacion­es’. Y es eso lo que ha llegado esta semana a la región. El viaje de prueba, con la ministra de Transporte­s, Raquel Sánchez, el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y otras autoridade­s se realizó desde Plasencia, una estación que, de momento, no va a estar ni siquiera conectada directamen­te a este Alvia, que tendrá una frecuencia de un trayecto Badajoz-Madrid de ida y vuelta al día.

La electrific­ación completa de la línea en la región no se dará hasta, al menos, 2023 y, teniendo en cuenta que aún falta por ejecutar todo el recorrido que atraviesa la provincia de Toledo, se calcula que no habrá alta velocidad de Badajoz a Madrid hasta, como mínimo, 2030. Más lejos queda aún la conexión con Lisboa, de la que no hay novedades.

La historia del ferrocarri­l extremeño es el relato de una serie de promesas incumplida­s y retrasos continuos, tantos como los que suele acumular el propio tren. Una historia interminab­le. Y que continuará.

 ?? EL PERIÓDICO ?? El ‘nuevo’ tren Los ferrocarri­les Alvia llevan en circulació­n por todo el país desde hace 15 años. -
EL PERIÓDICO El ‘nuevo’ tren Los ferrocarri­les Alvia llevan en circulació­n por todo el país desde hace 15 años. -

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain