Adiós a Pepe Extremadura, el trovador de su tierra
Defendió las raíces, cantó al poeta Gabriel y Galán y compuso su propio himno Recibió la Medalla de Extremadura en 2017, el mayor premio que concede la región
Escriben, cantan, componen, conservan la tradición, la guardan y la ayudan a cruzar de generación en generación para que no se pierda. Todas estas facetas aglutinan los trovadores, los que se encargan de pregonar la cultura popular allá donde fueran y todas estas facetas reunía Pepe Extremadura, el singular artista que llevó el nombre de Extremadura, su tierra, allá por donde fuera.
El cantautor falleció este jueves a los 73 años en su domicilio de Cáceres después de que desde meses llevara aquejado de varias dolencias que habían debilitado notablemente su estado de salud. El funeral tendrá lugar este viernes a las 17.00 horas en la concatedral de Santa María.
Figura de las letras y la canción de autor y firme defensor de la cultura extremeña, en 2017 recibió uno de los mayores honores para un extremeño, la Medalla de Extremadura, el máximo galardón institucional que otorga la región a sus nombres más ilustres.
Conocido por su nombre artístico, José Roncero (Zarza la Mayor, 1949 - Cáceres, 2022) -en multitud de semblanzas bajo el apellido de Ronceiro, Roseiro o incluso Robledofue orgulloso representante de la tradición extremeña por toda la geografía. Emigró con su familia, su padre era portugués y su madre extremeña, y se crió en el País Vasco aunque siempre se mantuvo vinculado a sus raíces. Formó parte del grupo teatral Aquelarre, con Mariví Bilbao (Marisa en Aquí no hay quien viva), fue activista por los derechos de emigrantes, forofo del Athletic y se relacionó con deportistas y músicos, desde Joaquín Sabina hasta Luis Pastor.
En cuanto a su trayectoria musical, fue fundador de la banda Los Apaches en su juventud en el País Vasco. Sobre este aspecto le recuerda Iñaki Domínguez en su libro `Macarras ibéricos: Una historia de España a través de sus leyendas callejeras': 2Recuerdo con mucho cariño a José Roncero. Hoy es conocido con el nombre de Pepe Extremadura pero a finales de los sesenta y principios de los setenta fue cantante de Los Apaches. Hacían una especie de soul rock muy en la onda de Los Canarios y tenían una legión de seguidores del barrio. Tocaron mucho durante sus años activos, pero nunca grabaron nada desafortunadamente. Roncero debía ser una fiera sobre el escenario. Llevaba el pelo casi por el pecho y una cinta en plan apache. Un día le detuvo la Guardia Civil en el barrio por ir sin camisa y lo llevaron al cuartelillo y le raparon la melena».
Más tarde, ya a caballo siempre entre País Vasco y Extremadura, compuso un himno alternativo y fue el primero en dedicarle un disco a Gabriel y Galán con sus letras en castúo. De hecho, fue miembro de La Asociación para la Defensa del Patrimonio Lingüístico Extremeño (APLEX) y una de sus apariciones anuales imprescindibles era siempre en el acto que organizaba cada 6 de enero la Asociación Cultural Amigos de la Estatua del Gabriel y Galán en Cáceres.
Aparte de la Medalla de Extremadura, que recibió tras años de iniciativas ciudadanas para que se la concedieran, fue reconocido con más premios como el de persona Ilustre del barrio bilbaíno de Otxarkoaga, el barrio de su infancia, la insignia de oro de la Federación de Emigrantes Extremeños en el País Vasco, el premio Tierra y Libertad Pablo Naranjo Porras 2009, entre otros.
Su círculo más allegado, aún conmocionado por la noticia, lamenta la pérdida de una figura insustituible para la cultura popular, incansable y siempre activo, y de lo más importante, de «una excelente persona».H