El renacer del ‘blockbuster’
El éxito de `Top Gun: Maverick', No es tanto una cuestión de nostalgia ★
`Avatar: el sentido del agua', `Creed III' y `Scream VI' revela la necesidad del público de volver a disfrutar de ver películas en los cines como de agradecer el hecho de poder tener otra vez la alternativa de ir a una sala a ver un entretenimiento «bien hecho»
No hace mucho se viralizaron unas imágenes en las que Steven Spielberg, en el almuerzo de los nominados a los Oscar, abrazó a Tom Cruise y le felicitó por haber salvado el cine con el espectacular éxito de
Top Gun: Maverick (2022), una de las películas más taquilleras de la historia. Le dijo: «¡Le has salvado el culo a Hollywood!». El filme de Cruise podría señalarse como el punto de partida del renacer del blockbuster. El éxito de la secuela tardía de Top Gun. Ídolos del aire (1989) podría haber quedado perfectamente en un fenómeno aislado, pero por suerte no ha sido así.
Desde el estreno de Top Gun: Maverick en mayo de 2022 (lleva recaudados más de 1.493 millones de dólares en todo el mundo, unos 1.392 millones de euros), ha habido varias películas de entretenimiento, muchas de ellas (no todas) de presupuestos generosos, que se han convertido en auténticos
blockbusters. Algunas eran éxitos más o menos esperados, como
Avatar: El sentido del agua (2022). Pero otras no lo eran tanto.
Dejando a un lado los grandes e inesperados éxitos de terror del año pasado y lo que va de este (como Smile y Barbarian), a los que ya se han dedicado numerosos artículos, y centrándonos en un cine menos específico y con voluntad de llegar al mayor número de espectadores, también han sido grandes éxitos de taquilla en Estados Unidos (y, las estrenadas internacionalmente, en el resto del mundo) M3GAN (2022), Creed III (2023), Scream VI (2023) y Oso vicioso (2023). La última (aquí se estrenó el 31 de marzo) es una comedia negra de acción sobre un oso que enloquece tras comerse un cargamento de cocaína.
Diversas razones
¿Por qué sucede esto? ¿Han vuelto las ganas de ir al cine? Quizá la clave sea que han vuelto las ganas de volver al cine a ver películas que, de alguna manera, tienen el mood de los blockbusters de otro tiempo. No es tanto una cuestión de nostalgia, que solo funciona en algunos de los casos citados,
como de agradecer tener otra vez la opción de ir a una sala de cine a ver largometrajes de entretenimiento «bien hechas» (esto no es ninguna tontería, es clave), con empaque y con la aventura y/o la emoción en primer plano.
Las razones pueden ser muchas y ninguna en concreto. Una podría ser cierto agotamiento de los espectadores ante determinados universos y franquicias de héroes y superhéroes: la taquilla de Ant-Man y la Avispa: Quantumanía (2023) ha sido un fracaso para Marvel (en relación a los números que ellos manejan). O, más evidente, el agotamiento evidente de algunas franquicias y universos en sí mismos.
Por un lado, el público tiene la necesidad descubrir relatos nuevos, de ahí el éxito de
M3GAN, Oso vicioso y Llaman a la puerta (2023). También de acercamientos menos perezosos a los que ya conoce (Top Gun: Maverick, Creed III y Scream VI). Por otro, quiere ver películas bien hechas y acabadas, que no parezca que han sido resueltas con piloto automático o estén directamente inacabadas, que luzcan distintas a las series de televisión de los mismos universos, en las que no se perciba el desconcierto de los actores al saberse perdidos en un croma infinito y que, de alguna forma, pidan ser disfrutadas en una pantalla grande. Los blockbusters (taquillizados en castellano) citados en este artículo cumplen esos mínimos que, hoy por hoy, han dejado de ser tan mínimos. La mayoría, además, están magníficamente ejecutadas, cabe decirlo.
Aun así, tampoco hay que desmerecer otra posible razón de su éxito. Se trata de las ganas de los espectadores de recuperar las salas como un espacio lúdico, de entretenimiento. En realidad, esto último no es tan distinto de la actual fiebre por asistir a conciertos multitudinarios (al precio que sea), de recuperar la experiencia colectiva y de celebración que la pandemia y el confinamiento nos negaron.
Próximos estrenos
En el caso del cine, como la oferta en plataformas es tan abundante y rica, es probable que muchos espectadores dejen para casa las propuestas más pequeñas y elijan ver en salas las que tengan esa naturaleza colosal, festiva y cele
Muchos espectadores dejan para ver en casa los filmes pequeños y en los cines los de naturaleza colosal
bratoria. De ahí el éxito de los títulos citados, o del que seguramente tendrán otras películas en la línea (entretenimientos con empaque, que van de frente, destinados a un público variado), entre ellas John Wick (2023), Dragones y mazmorras (2023) y Super Mario Bros.: La película (2023), las dos últimas con el atractivo añadido de estar destinadas sobre todo a un público infantil y juvenil. Algunas ya se han estrado y otras lo harán próximamente.
Más adelante le tocará el turno, en lo que se augura un año repleto de blockbusters, a esperados títulos como (entre otros) Posesión infernal: El despertar (abril); La sirenita, Fast X y Guardianes de la Galaxia Vol. 3
(mayo); Indiana Jones y el dial del destino y Transformers: el despertar de las bestias (junio); Oppenheimer
y Misión imposible: Sentencia mortal, parte 1 (julio); Dune: Parte 2
(noviembre) e incluso Barbie
(este verano).