El calor y la lluvia disparan la presencia del mosquito tigre también en Cataluña
La presencia de b estos insectos creció un 70% en el primer semestre del año
El mosquito tigre parece no conformarse con campar a sus anchas por el litoral de Castellón, donde se ha convertido los últimos años en un problema endémico que Mediterráneo ha denunciado en numerosas ocasiones. La alerta por esta plaga se ha disparado ahora también en Cataluña.
Las altas temperaturas y las lluvias constantes de esta primavera han creado las condiciones idóneas para la reproducción del mosquito tigre, como queda reflejado en las observaciones recibidas por la aplicación Mosquito Alert (plataforma gratuita en la que todos los ciudadanos pueden avisar de la presencia del insecto). Así, el número de este artrópodo –original de Asia y presente en Cataluña desde el 2004– registrado en el primer semestre del 2020 supone un aumento del 70% respecto al 2018, que era hasta la fecha el año con más mosquitos tigre observados a inicio de temporada. Con todo, el año con más ejemplares avistados en su conjunto sigue siendo el 2015.
La razón de este aumento se achaca al calor y la lluvia. La primavera del 2020 fue la cuarta más calurosa en España desde 1965, según la Agencia Estatal de Meteorología, y la quinta más lluviosa del siglo XXI. Además de las condiciones climáticas puede haber contribuido el confinamiento. El encierro provocado por el covid19 ha impedido el cuidado de numerosas segundas residencias en el litoral y la limpieza de pequeños depósitos de agua, el hábitat perfecto para el insecto.
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