La obra de Lledó asume el 90% de las ideas vecinales
El gobierno local afirma que el proyecto refleja lo sugerido en el proceso participativo
Ante las críticas vertidas desde la oposición municipal respecto del proyecto de remodelación de la avenida Lledó, el Ayuntamiento de Castelló remarcó ayer que el 90% de las sugerencias realizadas por la ciudadanía durante el proceso participativo han sido tenidas en cuenta a la hora de redactar el pliego de condiciones para la adjudicación de las obras.
Desde el equipo de gobierno insisten en las ventajas que la actuación reportará a la ciudad. «Mejorará la movilidad para los peatones y ciclistas, ganará espacio para las personas y reducirá la presión del vehículo privado, fomentando la creación de una zona más segura y saludable», remarcaron desde el consistorio.
Aunque, según precisaron, estas son solo «algunas de las líneas estratégicas» que justifican la ejecución de la actuación. La propia alcaldesa, Amparo Marco, explicó que «la reforma nos permitirá crear un espacio más seguro, especialmente para los niños y los mayores, con más metros cuadrados para los peatones e itinerarios seguros y accesibles». Una vez las obras están concluidas, el vial que conecta María Agustina con Lledó «dispondrá de más zonas verdes, de sombra, de juego y de descanso, un nuevo carril bici y menos tránsito», enfatizó la alcaldesa.
Esos incrementos a los que hace referencia Marco están cuantificados. Los ciudadanos tendrán un 35% más de espacio reservado a su disposición, lo que supone que del total de la superficie actual de este entorno urbano, el 68% será para los peatones.
También se ha calculado cómo afectará al tráfico rodado. Desde el Ayuntamiento aseguran que de los 4.251 vehículos que habitualmente circulan por la avenida, se pasará a 537. En términos de seguridad, para el equipo de gobierno, es un gran avance, pero además apuntan a otro efecto positivo desde el punto de vista medioambiental. Calculan que se reducirán las emisiones de CO2 un 87%.
El Ayuntamiento afirma también que los itinerarios seguros crecerán de 910 a 1.413 metros, a parte del carril bici de 1,4 kilómetros previsto. Y si bien se pretende reducir el paso de vehículos, se van a crear más plazas de aparcamiento; pasan de 397 a 435.