Mascarilla en la playa, sí... pero no siempre
Una de las cuestiones más controvertidas, y que más dudas generan cara al próximo verano, es el uso de la mascarilla en la playa. Y habrá que llevarla, pero no siempre. Resumiendo: para bañarse y tomar el sol, no; pero para pasear por la arena, acceder a ella y estar en los chiringuitos, sí, excepto en los momentos de comer o beber.
Y es que la última actualización de la Conselleria de Sanitat, de esta misma semana y a través de una nueva resolución en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV), considera actividades compatibles con el uso de la mascarilla el paseo por los accesos a playas, lagos y demás entornos naturales, el tránsito a la orilla del mar y de los demás entornos acuáticos, el uso de vestuarios de piscinas públicas o comunitarias, salvo en las duchas; y la permanencia en el exterior o interior de establecimientos de hostelería fuera de los momentos estrictamente necesarios para comer o beber, siempre a partir de los 6 años de edad.
Por contra, la norma actual permite no llevar mascarilla a la hora del baño en el mar, lagos, embalses, ríos o en otras zonas de baño; así como en piscinas, en el exterior o cubiertas; la práctica de deporte en el medio acuático, sea este natural o artificial; y los periodos de descanso de la persona antes o después del baño.
Ese periodo de descanso en la playa se ciñe, según explican desde la propia Conselleria de Sanitat, a que la persona en cuestión permanezca en un punto determinado y respetando la distancia mínima de 1,5 metros con otros ciudadanos que no sean convivientes, y sin que la agrupación de personas pueda superar en total el número máximo permitido.