Cuestiones legales desembocaron en el cierre del recinto deportivo
l Ayuntamiento de Benicarló invertirá un millón de euros para hacer posible la reapertura de la piscina municipal. Así lo anunció ayer la alcaldesa, Xaro Miralles, que indicó que la suma procede de la liquidación de las cuentas generales del 2020: «La ley de presupuestos permite a los ayuntamientos destinar los remanentes a gastos corrientes y a inversiones y, a diferencia de ejercicios anteriores, no estamos limitados a gastar solo una parte en inversiones financieramente sostenibles».
Los sobrantes del año pasado ascienden a un total de 4,3 millones y, además del millón que asignarán a suplementar la partida de Deportes, con el objetivo de poder efectuar la aportación municipal a la piscina, también resultarán reforzadas otras partidas de distintas áreas. Medio Ambiente recibirá un complemento de 1.234.000 euros para la limpieza de edificios públicos, la recogida selectiva de residuos o las inversiones en jardines, entre otros; y también destinarán 175.000 euros al departamento de Comercio, que emplearán en lanzar bonos para fomentar el consumo y para subvenciones para las empresas.
Miralles avanzó las inversiones más destacadas que el ejecutivo local tiene previsto realizar con los remanentes, pero no serán las únicas. La alcaldesa indicó que la próxima semana
El anuncio de la alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles, sobre la intención del consistorio de realizar una aportación de un millón de euros para posibilitar la reapertura de la piscina municipal no ha dejado indiferente, especialmente a los afectados por el cierre. La problemática de la instalación se remonta al 2008, cuando el Ayuntamiento firmó un contrato con la UTE FCC NitramPool para la gestión de la pisci
concretarán el detalle de todas ellas y de los gastos que se podrán llevar a cabo con el superávit.
En cuanto a la piscina municipal, la alcaldesa informó que los servicios técnicos están elaborando unos nuevos na mientras se pujaba el servicio, después de resolver el contrato con la anterior concesionaria por incumplimiento. Ese contrato estuvo vigente durante 12 años, hasta que los servicios jurídicos del consistorio determinaron que el acuerdo con la mercantil gestora era nulo de pleno derecho. Entonces, el ejecutivo local decidió cerrar las instalaciones hasta que no se formalice una adjudicación definitiva.
pliegos y el plan de viabilidad para volver a sacar a licitación la gestión y explotación de las instalaciones, después de que en la primera convocatoria, en noviembre del pasado año y cumplido el plazo, solo concurriera una mercantil y no se llegó a un acuerdo.