La Generalitat ondea la petición de liberalización
No es un asunto que recaiga en manos de la Administración valenciana ni siquiera de la estatal. No depende de decretos ni normativas que se elaboren desde ninguna conselleria. Sin embargo, el viraje de los gobiernos estadounidense y algunos europeos sobre la liberalización de las patentes ha hecho que el Consell agarre con más fuerza que nunca la bandera de su petición.
Porque es justo remarcarlo: el Consell lleva desde prácticamente el inicio de la campaña de vacunación pidiendo un cambio en la política burocrática sobre el antígeno que debe escribir las últimas líneas de la pandemia. En concreto, fue el pasado 26 de febrero cuando el gobierno valenciano suscribió la propuesta lanzada por Amnistía Internacional para «democratizar el acceso al tratamiento de la covid».
Quizás fue porque la Comunitat Valenciana era una de las afectadas de la falta de dosis o, quizás, porque la «solidaridad europea», de la que ayer hacía gala en su alocución en el Comité Europeo de las Regiones el president Ximo Puig, era tanto «por decencia» como «por inteligencia» ante el conocido riesgo que existe de que el covid no termine hasta que la vacunación no sea de alcance global. «Hemos de convencernos de que, en este mundo globalizado, nadie estará seguro hasta que no lo estemos todos», justificó Puig.
La reivindicación no es nueva, ni siquiera el foro en el que abanderar la petición. El pasado 2 de abril ya llegó a Bruselas un escrito desde el Palau de la Generalitat en la que pedía un cambio en el sistema de patentes.
Por su parte, ayer salió adelante la propuesta de Unides Podem en Les Corts, pero contó con el rechazo de PP, Ciudadanos y Vox.