El aumento de las temperaturas en Castellón complica la lucha antimosquitos
Este fin de semana se superarán los 30º en algunos municipios de la provincia El clima veraniego y las lluvias de abril son un gran enemigo para controlar las plagas
La lucha antimosquitos en la provincia tiene una difícil batalla a partir de este fin de semana con el aumento generalizado de las temperaturas en la mayoría de municipios de Castellón, que llega después de un abril e inicios de mayo lluviosos. Como si de un fin de semana de verano se tratara, el termómetro superará los 30 grados en varias localidades y la sensación térmica será incluso mayor en algunos puntos, lo que se convierte en una situación idílica para que la proliferación de estos insectos siga causando estragos en la provincia.
Tal y como ha ido transmitiendo Mediterráneo, numerosos vecinos de Castellón, especialmente de poblaciones de la Plana Baixa, han denunciado que «es el peor año en cuanto a número de mosquitos en estas fechas», y reclaman a la Diputación y los ayuntamientos que aumenten los tratamientos para no llegar a junio con una «plaga más descontrolada», advierten.
No obstante, la institución provincial reunió esta semana a los municipios para perfilar las acciones de prevención y eliminación de focos de mosquitos. En el acto telemático participaron cerca de una cincuentena de ayuntamientos y la diputada del Medio Natural, María Jiménez, trasladó lo «imprescindible que es escuchar las necesidades de cada pueblo para afrontar estos meses sin problemas». Una previsión que según los especialistas de la Universitat de València, encargados de elaborar la hoja de ruta con Diputación, está «controlada porque las mínimas todavía estaban siendo bajas». Un factor que empieza a desaparecer y que dificultará el control de los molestos dípteros.
En este sentido, la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología de la Comunitat es que «el fin de semana será muy cálido» con temperaturas por encima de los 30 grados en
Onda o Segorbe. Una circunstancia que, añadida a que la provincia ha vivido uno de los meses de abril más lluviosos de los últimos 30 años y que el termómetro lleva ya días por encima de los 20 grados, constituye un contexto perfecto para que se dispare la incidencia de los mosquitos en todo el territorio. De hecho, la previsión es que el cielo esté poco nuboso o despejado, con intervalos nubosos al principio de la jornada en el interior norte de Castellón, donde podrá caer alguna precipitación débil a primera hora, y han decretado nivel de preemergencia alto por riesgo de incendios en el litoral e interior norte de la provincia.