Detenido por matar a su mujer de un disparo en Asturias
María Teresa Aladro, de 48 años, es la quinta víctima en apenas 72 horas
María Teresa Aladro, Tere, vecina de Pola de Laviana, falleció en la madrugada de ayer tras recibir un disparo de escopeta de caza. Tenía 48 años. El presunto autor de los hechos es S. F. R., el que fue su marido durante más de dos décadas --y padre de su hijo, de 20 años--. Llevaban poco tiempo separados. El hombre, de 51 años, se entregó a la Guardia Civil. Pasará hoy a disposición judicial, a las 11.00 horas. Los que más conocían a la familia afirman que él era «muy celoso» y que ella «llevaba varios años sufriendo».
Tere Aladro se había mudado, tras la separación, a un piso de sus padres. En el número 3 de la calle Puerto de Tarna. Su exmarido vivía cerca y, el miércoles, el hijo de la pareja estaba pasando la noche en casa de su padre. Todo apunta a que S. F. R. cogió la copia de las llaves del joven para entrar de madrugada en la vivienda de la víctima. Llevaba su escopeta. S. F. R. es un cazador experimentado.
Ocurrió rápido y sin testigos. «Algunos oyeron como un golpe seco, yo no escuché nada», confirmó a este diario un vecino del bloque. Un golpe seco que fue un disparo. No se descarta que Tere Aladro estuviera durmiendo cuando la mató. No constan antecedentes de violencia de género, sobre él no pesaba ninguna denuncia. Lo confirmó ayer la directora de Igualdad del Principado de Asturias, Nuria Varela. Matizó que la víctima sí había visitado en días previos el Centro Asesor de la Mujer en Laviana, «para informarse para pedir el divorcio».
CINCO MUERTES EN TRES DÍAS Con el asesinato, ayer, de María Teresa Aladro son cinco los crímenes machistas cometidos en apenas 72 horas en España. Así, una mujer embarazada de tres meses y su hijo de siete años fueron asesinados en la localidad mallorquina de Sa Pobla (Mallorca), a los que se suman las muertes de una mujer de 52 años en Creixell (Tarragona) y otra de 42 años en Corbera de Llobregat (Barcelona). En estos dos últimos casos, los agresores se suicidaron después de matar a sus parejas. En lo que va de año, trece mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas, crímenes que han dejado a cinco menores huérfanos. Desde el 2003, son 1.091 las víctimas mortales por violencia de género.