Los diez errores que han llevado a la quinta ola del coronavirus
No acarrea el mismo peaje de hospitalizaciones y muertes, al menos por ahora, que anteriores olas El incremento del número de contagios arroja sombras sobre un verano que se presumía tranquilo
El freno a la desescalada, con la vuelta de las medidas restrictivas que se habían aligerado es solo uno de los inconvenientes de esta quinta ola anunciada, como las anteriores, por no pocos científicos a la vista de los errores cometidos en las anteriores. Veamos.
FALTA DE ESTRATEGIA
Es la madre de los errores: el Gobierno tiró las riendas de la gestión, evitó legislar una ley de pandemias y se limitó a anunciar avances en vacunación. «El Gobierno no está respondiendo bien, debe tomar medidas», advertía en mayo el epidemiólogo Jeffrey V. Lazarus, investigador del Instituto de Salud Global de Barcelona. Ha seguido primando la improvisación, por detrás del virus.
ALTA INCIDENCIA DE BASE
La incidencia acumulada (IA) de España a 14 días no ha bajado este año de 92. Es el mínimo que reflejan los informes de Sanidad del 21 al 23 de junio, y un suelo demasiado alto desde el que iniciar la desescalada. Un año atrás, la tabla reflejaba una IA a 14 días de 7,93. En Asturias y Galicia, estaba por debajo de 1. Al inicio de este verano, Alemania, Francia e Italia bajaron sus incidencias hasta casi cero covid. La incidencia a 7 días el 24 de junio era de 74 para España, 31 para Francia, 14 para Italia y 8 para Ale--mania. El 9 de julio, era de 315 para España, 48 para Francia, 16 para Italia y 8 para Alemania.
AUSENCIA DE PROYECCIONES
Fernando Simón sigue ejerciendo de comentarista: Expone los datos pero evita realizar proyecciones. No es lo que ocurre en otros países: la semana pasada, la ministra de Sanidad de Portugal, Marta Temido, dijo que se duplicarían los contagios en dos semanas por la variante delta. En Reino Unido y Alemania hacen públicas predicciones oficiales. La única proyección del Gobierno central es la de la supuesta inmunidad de grupo del 70% para el 18 de agosto.
MENSAJES TRIUNFALISTAS
Si hace un año fue el «hemos vencido al virus» de Pedro Sánchez en el Congreso, este verano ha sido la ministra de Sanidad, Carolina Darias, quien pronunció la frase de que «las mascarillas dejan paso a las sonrisas». «Puede dar la sensación de que al quitar la mascarilla ya hemos vencido otra vez --opina el virólogo Ignacio López-Goñi, catedrático de Microbiología de la Universidad de Navarra--. Hubiese preferido que se explicase cómo se transmite el virus». Además, el hecho de haberse centrado solo en la vacunación, como ha hecho Pedro Sánchez, acaba transmitiendo el mensaje de que es la única herramienta preventiva importante, y no es así. Las medidas de mascarilla, distancia, ventilación y aforos siguen siendo fundamentales, dicen todos los expertos.
CONTROL DE FRONTERAS
España fue el único país de Europa que dejó entrar a los turistas británicos sin PCR, cuarentena ni vacunación, como Sánchez proclamó en Fitur. La apertura, criticada por la Unión Europea por incoherente, ha permitido una entrada más rápida de la variante delta, que es más contagiosa que la alfa.
MENOSPRECIAR LAS VARIANTES
Como hizo con la alfa o británica, Simón restó importancia a la variante delta o india, aportando datos desactualizados sobre su presencia en España y poniendo en duda los estudios internacionales sobre su mayor transmisibilidad y su escape parcial a la inmunidad en los vacunados con una dosis.
FALTA DE DIVULGACIÓN
Volvemos a ver anuncios de Tráfico, pero no proyectamos campañas divulgativas sobre las vías de contagio, el mayor riesgo de los interiores concurridos o la necesidad de ajustar las mascarillas y medir el CO2. Bastaría un mensaje sencillo: en interiores, mascarilla y distancia. Al aire libre, mascarilla o distancia. Tampoco se ha promocionado como se debe la app Radar Covid.
AUTOTEST DE ANTÍGENOS
Al permitir repetir las pruebas con mucha frecuencia, los test de antígenos rápidos y baratos son una herramienta muy útil para evitar contagios, más aún en pleno verano, cuando se multiplican las reuniones sociales. En Portugal y otros países se venden en supermercados por unos 3 euros, pero aquí todavía no se han aprobado.
AGLOMERACIONES
Se ha tardado en actuar contra ellas, sobre todo porque tras el final del estado de alarma, el 9 de mayo, muchos jóvenes --y no tan jóvenes-- salieron en tromba a la calle y no subió la incidencia. Cundió la falsa sensación de que no iba a pasar nada.
¿NO PASA NADA?
Nadie niega que la quinta ola es más leve por las vacunas, pero los efectos económicos y sobre la salud son relevantes. Destacados científicos han firmado un documento en The Lancet advirtiendo del peligro de la reapertura en Reino Unido el día 19.