Ancelotti se hace cholista con la pizarra
El equipo blanco gana el clásico en las áreas
Había advertido Koeman en la previa que la identidad del Madrid era la de un equipo que «ataca a la contra». Y respondió Ancelotti que «la contra es la forma más rápida de marcar goles». Así llegaron los dos tantos madridistas en el Camp Nou. Los partidos se ganan en las áreas y el Madrid fue claramente vencedor en ellas. Supo defender con estoicismo la suya, ante un Barça ofensivo en el espíritu e inofensivo en la ejecución. Solo sufrió con dos ocasiones clamorosas, una de Dest y otra en un cabezazo tenso de Piqué que se marchó cruzado.
Lo clavó Courtois con su análisis: «Con balón estuvimos bien. Ellos no tuvieron ocasiones hasta el final del partido. No queríamos encerrarnos en el área. Salimos jugando desde atrás y cuando nos apretaban el míster nos pedía jugar en largo. Era importante no jugar a lo loco hoy». El clásico, en clave madridista, tuvo un protagonista claro en la primera mitad: Vinicius de Olivera Júnior. No solo trabajó los espacios, penalizó a Mingueza hasta provocar su sustitución. Corrió, encaró, frenó, contemporizó, descargó, casi forzó un penalti... El Madrid exhibió un espíritu cholista, solidario, sacrificado. Un equipo con una media de 28 años, que tiene jugadores experimentados como Modric, Kroos, Benzema, Casemiro y Alaba. Futbolistas impecables en la toma de decisiones y la lectura de juego. Algo que Ancelotti ha contagiado a jóvenes como Vinicius.
Para el técnico italiano su equipo realizó «un partido inteligente, muy bien atrás y muy peligrosos a la contra». «Somos un equipo sólido, esté delante el Shakhtar o el Barcelona. Es difícil encontrar ocasiones de los rivales, lo que confirma que hay compromiso colectivo. Y eso es decisivo, porque la calidad arriba no hay que trabajarla. Es algo genético en estos jugadores», dijo.