Ranucci afirma que aterrizará en el Castellón la semana que viene
El empresario argentino espera acabar de limar las diferencias antes de este sábado
Pues parece que esta semana tampoco va a ser la del cambio en el Castellón. Gustavo Ranucci, todavía desde Buenos Aires, confirmaba ayer a Mediterráneo que se mantenía en permanente contacto telefónico con Vicente Montesinos para terminar de limar las diferencias, pero que no ve factible la rúbrica definitiva del acuerdo antes del fin de semana. Con todo, anuncia que tiene previsto su aterrizaje en Castalia la próxima semana.
Las dos partes de la mesa negociadora reconocen que el acuerdo está cercano, que se acabará firmando, pero lo cierto es que la temporada 2022/2023 arranca oficialmente el viernes y el Castellón no tiene entrenador ni una plantilla totalmente definida, aunque entre jugadores y canteranos atados hay cerca de una veintena de futbolistas con contrato en vigor. Al margen de los cedidos que han vuelto (Iván Martínez a Osasuna, Álex Blesa al Levante y Vicente Esquerdo al Valencia), Kevin Sibille no ha esperado más y se ha enrolado en el Atlético Baleares, en tanto que Juanto Ortuño reforzará al Eldense (sin duda, dos firmes candidatos a luchar por lo mismo que los albinegros: los play-off).
En este sentido, Ranucci insiste en no tomar ni una sola decisión de calado hasta que, oficialmente, pase a formar parte del accionariado del Castellón. Montesinos le ha informado de que ha movido ficha por encontrar un nuevo inquilino para el banquillo de Castalia, pero él se mantiene a la espera. Además, recalca que buscará un modelo de gestión deportiva de consenso (llegó a tener una importante cartera de jugadores profesionales y, en los últimos años, ha estado relacionado con el fútbol formativo de su país, pero también de Chile o Bolivia).
En este sentido, la figura de Pablo Burtovoy (actual director de Educación FIFPRO Sudamérica, entidad que trabaja en pro de los derechos laborales de los futbolistas), hombre de su entera confianza, será crucial, sobre todo cuando Ranucci no esté en España.