Los incendios obligan al Consell a revisar los planes de emergencias
Bravo advierte de que los fenómenos extremos serán cada vez más virulentos y, a la vez, erráticos Crearán una unidad para anticipar decisiones y analizar la vulnerabilidad de las infraestructuras
El Consell revisará el Plan Territorial de Emergencias de la Comunitat Valenciana y las actuaciones municipales tras los incendios voraces que han asolado casi 30.000 hectáreas del patrimonio natural valenciano durante este verano. Así lo anunció ayer la consellera Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, tras una reunión de análisis de los incendios forestales ocurridos este estío con los consorcios de bomberos provinciales y bomberos de la Generalitat valenciana.
«Hemos hecho una reflexión para analizar el plan territorial de emergencias valenciano pues, después de los incendios de este verano, estamos abocados a unos escenarios cada vez más complejos derivados de la crisis climática», dijo la consellera, al tiempo que detalló que el comportamiento del fuego será «virulento y errático».
Sobre las inundaciones, Bravo subrayó que «los escenarios son difíciles» y por eso también se revisarán los planes para diferentes tipos de emergencias. «La nueva situación de multiemergencia exige esa revisión para determinar nuevos métodos de actuación, recursos, así como la incorporación de nuevas tecnologías para mejorar nuestra respuesta ante cualquier tipo de emergencia», dijo.
La consellera anunció, además, la creación de una Unidad de Análisis y seguimiento de la emergencia. Un equipo que se incorporará al puesto de mando avanzado y estará asentado en el Centro de Coordinación de Emergencias. El objetivo: determinar la vulnera
bilidad de las infraestructuras críticas que se puedan ver afectadas y, a través de las nuevas tecnologías, estudiar el comportamiento del fenómeno que causa emergencias. Bravo, respecto a esta nueva unidad, incidió en que no se crea a raíz del incidente del tren cuya circulación se vio interrumpida al toparse con el incendio forestal de Bejís, sino que se debe a la necesidad de fortalecer la respuesta al nuevo escenario multiemergencia a raíz del cambio climático.
La nueva unidad se incorporará al Puesto de Mando Avanzado (PMA) de cada emergencia y estará asentada en el 112, desde donde «determinará la vulnerabilidad de todas las posibles infraestructuras críticas que se puedan ver afectadas por cualquier tipo de situación de emergencia». «Queremos
saber cómo se comportará el fuego para adelantarnos y tomar decisiones anticipadas para minimizar los riesgos», explicó ayer Bravo. «Es imprescindible estudiar el comportamiento del mismo para abordar de forma eficaz la causa de la emergencia», señaló.
PERFILES PROFESIONALES Por eso, la nueva unidad dará soporte al responsable del puesto de mando avanzado en cualquier tipo de emergencia. «Vamos a estudiar los perfiles y reunirnos con expertos para que nos aporten cual va a ser el perfil profesional adecuado para la unidad de análisis», concluyó la responsable. La también consellera de Justicia agradeció a los bomberos su gran trabajo. «Se han jugado la vida todos los días por nuestro patrimonio natural y
por las vidas. Muchos renunciaron a sus vacaciones para sumarse, lo que demuestra su espíritu de servicio publico y solidaridad», manifestó la mandataria.
INVESTIGACIÓN ABIERTA Por otra parte y respecto al incidente del tren afectado por su proximidad al incendio de Bejís, a la espera de recibir el informe definitivo del PMA, insistió en que la dirección de la extinción no avisó a Adif de las llamas porque «un incendio convencional se convirtió en tres horas en una tormenta de fuego» y pasó de 600 hectáreas calcinadas a 3.700. «Nunca, en ningún momento, hemos dejado fuera de ningún escenario a Adif», aseveró.
Según defendió, en tres horas se tomaron «muchísimas decisiones, decisiones importantes para
salvar la vida de las personas», cuando «poblaciones tuvieron que ser evacuadas de forma rapidísima y el propio puesto de mando avanzado se vio envuelto por las llamas, con bomberos atrapados». Recordó que hay una investigación abierta, que pide respetar, y que en el juzgado «se tendrá que determinar la causa-efecto».
La también titular de Justicia se preguntó qué habría pasado si el tren no hubiera circulado allí o «si nadie hubiera sembrado una situación de pánico» en el interior que dio lugar a que algunos pasajeros bajaran del convoy --cuando resultaron heridas-- además de recordar que «en otros vagones había gente tranquila y no pasó nada» y que este tren «no sufrió ningún daño por las llamas porque no estaban en la vía».