La crisis de la cerámica ya supone los primeros ERTE en el transporte
La federación de la provincia detecta un fuerte descenso de tráfico este mes
El sector se asoma a una guerra de precios ante la bajada de la demanda
La crisis energética que afecta de lleno a la cerámica de Castellón empieza a generar efectos colaterales en otros sectores. Incluso aquellos que hace solo un año necesitaban incorporar urgentemente a nuevos profesionales para mantener la actividad. El presidente de la Asociación Empresarial Castellonense de Transportes de Mercancías por Carretera (ACTM), Carmelo Martínez, señala que las perspectivas para los próximos meses son de «una bajada de la demanda de la actividad, y ya hay empresas que han empezado los trámites para solicitar ERTE».
Apunta que en la última quincena «ha habido un parón en servicios como el transporte de contenedores, sobre todo en la cerámica», lo que se ha unido el grave problema que supone para el clúster el bloqueo de las relaciones comerciales con Argelia, que perjudica de lleno a las empresas dedicadas a la fabricación de esmaltes y maquinaria. «El descenso ha sido brutal, ya que había muchos servicios entre Argelia y el puerto de Castellón», añade Martínez, lo que tiene un impacto directo entre los transportistas.
A LA ESPERA En cuanto a los expedientes de paro temporal, al presidente de ACTM no le consta que ninguno de los presentados esté activado, aunque teme que se dará el paso en los próximos meses, en función de cómo evolucione una industria como la azulejera, que empezó a presentar ERTE desde comienzos de año, y que se aplican de manera generalizada desde hace unas semanas. Carmelo Martínez añade que en el sector «hay riesgo de una rebaja de precios, ante la necesidad de seguir manteniendo la actividad con una demanda a la baja», algo que afectará de manera directa a los márgenes de las empresas de transporte por carretera, con unos precios del carburante que se mantienen altos y sin expectativas de reducirse a medio plazo.
Las compañías de transporte por carretera de Castellón emplean a más de 6.000 personas. La patronal y los sindicatos hicieron esta cuantificación a finales de abril, cuando se firmó el vigente convenio colectivo, que establece un incremento salarial del 9% en el periodo entre el 2022 y el 2024.
La actual incertidumbre contrasta con la falta de profesionales del pasado mes de noviembre. En ese momento se calculó que el déficit de camioneros en la provincia era de unas 500 personas.