Alós: «Solo una patrulla de la Guardia Civil vigilaba el sábado el litoral sur»
El alcalde de Moncofa denuncia la falta de agentes tras los robos en el estanco, un bar y la gasolinera Ayuntamiento y vecinos exigen la presencia de más efectivos para acabar con la «inseguridad»
El robo en el estanco de la playa de Moncofa, que ocurrió en la madrugada del sábado al domingo, tal como informó ayer Mediterráneo, ha puesto en tela de juicio el número de agentes de la Guardia Civil desplegados en la zona. Hasta el punto de que el alcalde, Wences Alós, denuncia que el día en el que se perpetró el asalto en el establecimiento «solamente una patrulla cubría el litoral sur».
Y es que esta «falta de vigilancia» que denuncia el primer edil no afecta únicamente a su localidad, sino también se extiende a los municipios de los alrededores. De hecho, recrimina que esa sola patrulla debía abarcar el sábado cinco municipios: «Nules, Almenara, la Llosa, Xilxes y Moncofa».
Se trata de localidades costeras con establecimientos en sus playas, que con la llegada del fin del verano y la marcha de los poseedores de segundas residencias a su vivienda habitual, se convierten en un blanco fácil para los ladrones al haber mucha menos gente.
Ante esta situación, Alós anuncia que ha solicitado una reunión con la subdelegada del Gobierno, Soledad Ten. «La intención es comunicarle la situación que estamos pasando en la playa de Moncofa y tratar de aumentar la vigi
lancia para no solo evitar los robos, sino para incluso poder detener a los atracadores», explica el munícipe, conocedor de que esta «falta de agentes» es extensible a muchas localidades vecinas.
VECINOS «DESAMPARADOS» Si la procupación del alcalde es patente, la de los vecinos no es menos notoria. Muchos se sienten «desamparados» ante esa «ausencia
de vigilancia», denuncian, ya que advierten de que «casi todos los días» hay conatos de robo, que en ocasiones no llegan a materializarse y en otras, como la pasada semana, los atracadores acceden a establecimientos y, además de llevarse enseres de su interior, provocan grandes destrozos.
No en vano, lamentan que el asalto que sufrió el estanco de la playa de Moncofa es solo la punta
del iceberg, ya que en menos de siete días ha habido robos en un bar del núcleo marítimo y en la gasolinera de la zona (donde se llevaron el dinero de la máquina de tabaco). Al ser con un modus operandi muy similar al del estanco, la mayoría cree que podría tratarse del mismo grupo de cacos.
Por ese motivo, los vecinos exigen aumentar la vigilancia en el municipio, tanto de Guardia Civil
como de Policía Local, porque, avisan, «de lo contrario, los robos no solo no se evitarán, sino que irán a más». La razón principal de su sospecha es que septiembre empieza a ser un mes propicio para posibles hurtos, puesto que, a diferencia de en julio o agosto, cuando las viviendas están llenas, ahora comienzan a vaciarse, o ya están vacías, y los negocios no registran la misma afluencia de clientes.