Biden avisa a Moscú de que una guerra nuclear «no puede ser ganada»
«Esta guerra trata de extinguir el derecho de Ucrania a existir como estado», afirma
Sánchez califica de «inadmisibles» las amenazas del «agresor» Putin
Desde que George Bush atacó a Sadam Hussein desde el estrado del debate plenario de la Asamblea General de Naciones Unidas no se recordaba de un presidente de Estados Unidos un señalamiento tan directo a otro líder mundial como el que Joe Biden lanzó ayer contra su homólogo ruso, Vladímir Putin, por la guerra de Ucrania. El mismo día en que el líder del Kremlin anunciaba una movilización de 300.000 reservistas y volvía a realizar veladas pero inequívocas amenazas nucleares, Biden señaló directamente al presidente ruso, definiendo su invasión de Ucrania como «una guerra brutal e innecesaria elegida por un hombre». «Un miembro permanente del Consejo de Seguridad invadió a su vecino, intentó borrar el estado soberano del mapa», denunció el demócrata, que acusó a Rusia de haber «violado descaradamente los principios centrales de la Carta de Naciones Unidas». Concretamente, Biden señaló a la «farsa» de referendos organizados por el Kremlin en las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk y en territorios ocupados del sur de Ucrania de Jersón y
Zaporiyia como violaciones «significativas» de esa carta fundacional del organismo.
RENDIR CUENTAS Biden habló también de actos «escandalosos» y de «atrocidades y crímenes de guerra» por las que se deberá buscar que el Kremlin rinda cuentas, mencionando las fosas comunes y las señales de tortura identificadas en cadáveres pero también los ataques a escuelas, hospitales y estaciones. Asimismo, cuestionó los argumentos de Putin para lanzar la invasión asegurando que «na
die amenazó a Rusia y nadie más que Rusia buscó el conflicto». E hizo un resumen del fondo del conflicto: «Esta guerra trata de extinguir el derecho de Ucrania a existir como estado, simple y llanamente, y como pueblo», dijo. «Estén donde estén, vivan donde vivan y crean lo que crean, debería hacer que se les hiele la sangre». El mandatario estadounidense alertó también sobre las amenazas de conflicto nuclear que ha estado lanzando Putin, y ante ese reto no solo aseguró que Washington seguirá buscando «medidas de control de armas críticas» sino que también lanzó un mensaje global: «Una guerra nuclear no puede ser ganada y nunca debe ser librada».
Para Biden las acciones de Rusia no son solo una afrenta a Ucrania, sino a todo el sistema establecido después de la Segunda Guerra Mundial. Y por eso en su discurso ante la ONU aseguró que «si las naciones pueden perseguir sus ambiciones imperiales sin consecuencias ponemos en riesgo todo lo que representa esta institución, todo». Reforma del Consejo de Seguridad. El líder estadounidense también aprovechó la situación para subrayar indirectamente la incapacidad para hacer frente al conflicto del Consejo de Seguridad, el órgano que se encarga del mantenimiento de la paz y la seguridad y donde tienen poder de veto los cinco países que son miembros permanentes, incluyendo Rusia, China y el propio EEUU. Y ha urgido a los miembros del Consejo a «mantener y defender la carta y abstenerse de usar el veto excepto en situaciones puntuales y extraordinarias».
También el presidente español, Pedro Sánchez, que se encuentra en Nueva York para la Asamblea General, abordó situación. En unas declaraciones a CNN, Sánchez mostró su convicción de que el mandatario ruso, «el agresor, ha asumido que está perdiendo la guerra». Sánchez denunció también los referendos de adhesión y aseguró que «nunca serán aceptados por la comunidad internacional». Asimismo, calificó de «totalmente inadmisibles» las amenazas lanzadas por Vladímir Putin, pero desde Moncloa también se apuesta por rebajar la retórica sobre la amenaza nuclear.