La economía se aceleró en el segundo trimestre hasta el 1,5%
El INE eleva el ritmo de aumento del PIB en cuatro décimas respecto al anterior Los alimentos acumularon el mes pasado un alza de casi el 14%
La economía española confirmó en el segundo trimestre una mayor aceleración de la prevista, con un aumento con respecto al periodo enero-marzo del 1,5%, muy por encima del 1,1% estimado en julio, según los datos definitivos dados a conocer ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En términos interanuales también aumentó el alza, hasta el 6,8%, una décima más que en el trimestre precedente.
La mayor velocidad de crucero se produjo también en el empleo equivalente a tiempo completo, con un crecimiento intertrimestral del 1% frente al descenso del 0,4% calculado en julio pasado. El segundo trimestre presentó un elevado contraste con respecto al descenso intertrimestral del 0,2% arrojado por los datos definitivos del periodo enero-marzo. De haberse producido un descenso en el periodo abril-junio se habría incurrido en una recesión técnica, que son dos trimestres consecutivos de caída. Pero en el segundo trimestre se aceleró fuertemente el ritmo.
Los datos provisionales ya indicaban un mayor ritmo de actividad del previsto en el periodo abril-junio, que pudo consolidarse entre julio y septiembre gracias al turismo. Desde el Gobierno entienden que los datos confirman «la solidez del crecimiento de la economía española impulsada por la demanda nacional y las exportaciones». A juicio del Ejecutivo, las medidas para proteger a empresas, familias y colectivos
vulnerables de la subida de los precios de la energía y otras materias primas y el avance en el despliegue del plan de recuperación explican el buen comportamiento de la economía.
El INE confirmó el incremento del PIB el pasado año hasta el 5,5% y la aceleración del crecimiento económico en el segundo semestre del pasado año. A su vez se ha revisado al alza el crecimiento de todos los trimestres desde 2021, a excepción del primero de 2022. El mercado laboral refleja también esta evolución de la economía, con la creación de 939.000 puestos de trabajo en el último año, y la mejora de la productividad por hora trabajada, según fuentes oficiales.
Las incógnitas surgen en torno al cuarto trimestre. Algunos analistas ya apuntan a la posibilidad de una recesión, cuya duración dependerá de la evolución de la infla
ción, una de las variables que más preocupa en la actualidad. En el caso menos pesimista se prolongaría entre el cuarto trimestre de este año y el primero del que viene.
RETROCESO DEL 0,2% La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) prevé que el PIB retrocederá un 0,2% en el tercer trimestre del año en tasa intertrimestral, lo que se correspondería con una tasa interanual en el periodo del 3,4%. De acuerdo con la última actualización del modelo de previsión de la evolución del PIB en tiempo real (MIPred) publicado por la Airef, el nivel de actividad se situaría 2,4 puntos por debajo del correspondiente al cuarto trimestre de 2019, antes de la pandemia. La subida del nivel general de precios (10,5% en agosto), que comenzó con la energía, se ha trasladado al conjunto de la economía y, en especial, a los alimentos, que el mes pasado acumularon un alza de casi el 14%.
En un reciente encuentro con periodistas, los profesores del IESE Xavier Vives y Pedro Videla anticiparon la posibilidad de una recesión, cuya profundidad y duración dependerá de diversos elementos, como la escalada del nivel general de precios y la evolución de la guerra en Ucrania. Por lo pronto, entre abril y junio se ha consolidado una evolución positiva gracias a la reactivación del consumo privado tras el mal dato del primer trimestre y a la buena marcha del turismo, según CaixaBank Research.
El Gobierno estima que el PIB crecerá este año el 4,3%. Por su parte, el panel de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) mantiene su estimación de un crecimiento del 4,2% este año.