Los Mossos buscan a los autores de los incidentes del Cornellà-Castellón
Tres personas resultaron heridas de forma leve por la agresión de unos encapuchados
Ya en sus respectivos domicilios, y algo más tranquilos, los aficionados del Castellón que el domingo se desplazaron a tierras catalanas para presenciar en directo el choque que enfrentó a su equipo con el Cornellà, y que acabó con empate sin goles, aún no dan crédito a lo sucedido a su llegada a las inmediaciones del RCD Stadium, donde un grupo de seguidores violentos les esperaban «con bates y palos».
Desde los Mossos d’Esquadra explicaron que estos incidentes se produjeron antes del encuentro, concretamente entre el centro comercial Splau y el estadio del RCD Espanyol --donde el Cornellà disputa sus partidos como local esta temporada--, y se saldaron con una única persona herida leve y que esta no quiso presentar denuncia. Así, el partido se pudo disputar sin problemas, aunque los Mossos realizaron un acompañamiento a los aficionados del conjunto orellut a la salida del estadio «para evitar nuevos incidentes».
No obstante, desde la Federación de Peñas del Castellón (Fedpecas), encargada de organizar el desplazamiento, se hablaba de tres personas afectadas: un seguidor del equipo albinegro que recibió un puñetazo y le rompieron las gafas; otro que requirió asistencia sanitaria con un corte en la cabeza; y la citada mujer, que no era seguidora del Castellón, pero pasaba por el lugar y que fue empujada, quedó tendida en el suelo durante media hora y fue posteriormente trasladada a un centro médico en ambulancia.
Los Mossos d’Esquadra investigan el suceso para esclarecer quién lo originó, pues los agresores iban encapuchados y se desconoce a qué club pertenecían.
LOS TESTIMONIOS Algunos de los aficionados que se vieron envueltos en los lamentables acontecimientos de la previa del choque relataron para Mediterráneo cómo lo vivieron. Samuel, seguidor del Castellón, explicó que «estábamos llegando al centro comercial unos cuantos aficionados y de repente vimos a varios aficionados del Castellón correr cerca de nosotros. Cuando vimos llegar al grupo de ellos con palos y piedras nos metimos rápidamente en un restaurante corriendo y estuvimos unos cinco minutos dentro. Cuando se calmaron los ánimos salimos. Fue un gran susto».
Uno de sus compañeros orelluts, Jorge, relató que «yo estaba en el
servicio de un bar, cuando salí oí gritos, ruidos y botellas romperse y vi sillas volar. Junto a mis compañeros nos metimos dentro del bar, junto a vecinos de Cornellà que estaban allí comiendo algo antes de ir al fútbol. Se perdieron calle al fondo. No vi más. Fue algo triste, lamentable y menos mal que todo quedó en un susto».
Por su parte, Adrián --también aficionado del Castellón-- declaró que «nosotros bajamos del autobús y fuimos dirección al centro comercial que está a unos tres minutos andando. Por suerte fuimos de los primeros en salir del bus y llegar hasta allí. Una vez llegamos al centro comercial vimos a mucha gente corriendo hacia nosotros y a lo lejos gente con palos y tirando piedras. Corrimos hasta que nos resguardamos en los baños de un bar. Pasados unos cinco minutos nos dijeron los dueños del bar que podíamos salir».
Los incidentes pillaron en la zona también a algunos seguidores del equipo local, como Joel y Marta, quienes comentaron que «estábamos llegando al campo y de repente empezaron las carreras, seguidores del Castellón corriendo porque les perseguían un grupo de encapuchados con palos. En un momento determinado, una señora mayor que lo vio se levantó de la terraza del bar para irse corriendo y fue arrollada. Cayó al suelo y llamamos al 112 para
que viniera una ambulancia. Fue una situación que para nada esperábamos vivir cuando salimos de casa para ir hacia el campo».
Además, Alfred, socio del conjunto catalán, mostró su desconocimiento sobre quiénes podían ser y aseguró que «me extraña que sean del Cornellà». «Yo estuve la pasada temporada en Castalia, ganamos, el público nos aplaudió y nosotros tan felices por lograr la salvación. Por eso no entiendo nada. Fueron un par de minutos muy jodidos, con gente corriendo y detrás otros con palos y lanzándoles botellas», añadió.
EL CORNELLÀ ANUNCIA MEDIDAS Nada más conocerse los hechos, los dos equipos condenaron los actos violentos. «Al CD Castellón le parece bochornoso y lamentable que estos actos sucedan a día de hoy en el mundo del fútbol y quiere mostrar su total repulsa», remarcó el texto del equipo orellut. Mientras, desde el Cornellà se explicó que condenaban «rotundamente los incidentes producidos entre aficionados y, en caso de confirmar vinculación directa de aficionados del club, se tomarán medidas de suspensión o expulsión para todos los implicados».
INCIDENTES PREVIOS Estos hechos previos no fueron la única polémica futbolística del fin de semana en Cornellà. Los vigilantes de seguridad privada desplegados el viernes en el estadio para un amistoso entre Marruecos y Chile se vieron superados por algunos aficionados marroquíes que acudieron a animar a su equipo. Algunos de ellos saltaron al terreno de juego, hubo invasión final del campo y dieron fuertes patadas contra las puertas de acceso.