Puig anuncia un lobi europeo para ayudar a la cerámica
Los presidentes regionales pedirán reunirse con la Comisión Europea para velar por el sector Considera que la situación de la industria es «inaguantable» y está en juego el «futuro»
El president de la Generalitat, Ximo Puig, considera que la situación del sector cerámico europeo es «asfixiante» debido a la escalada de costes energéticos, por lo que reclama la intervención de las instituciones comunitarias para garantizar su futuro. Una postura compartida por el presidente de la región italiana de Emilia-Romaña, Stefano Bonaccini. Castellón y esta región del país transalpino tienen en común la concentración de las producciones nacionales de azulejos, por lo que ambos territorios están afectados por la crisis agravada desde el estallido de la guerra en Ucrania.
Los dos presidentes acordaron ayer hacer un frente común ante la Unión Europea para activar medidas que salven esta industria. «La primera decisión que hemos tomado es pedir una reunión con el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Paolo Gentiloni, para intentar visualizar de manera clara y directa en la Unión Europea que la situación de esta industria es absolutamente inaguantable e inaplazable», dijo. Considera que debe haber una acción de las instituciones comunitarias «porque está en juego un tejido industrial fundamental». «Estamos para ayudar y promover la cerámica, pero con estos precios es muy difícil mirar hacia adelante», comentó. Puig apuntó que la visita a Bruselas será antes de final de año.
A la inquietud que provoca la elevada cotización del gas, Puig añadió la necesidad de modificar el mecanismo del mercado de emisiones de CO2, que en los últimos tiempos se ha caracterizado por «tener una mercado especulativo, que afecta a los mercados de la cerámica».
Por su parte, el presidente de Emilia-Romagna también hizo referencia a la necesidad de hacer un frente común, y añadió la voluntad de «trabajar para encontrar soluciones que mantengan unidos el esfuerzo y el medio ambiente» en el sector.
La de Ximo Puig es la principal presencia institucional que acompaña a los empresarios de Castellón en
el certamen de Bolonia. A diferencia de la feria Coverings de Estados Unidos, en la que la ministra de Industria, Reyes Maroto, dio la cara por el Ejecutivo, en esta ocasión no hay representantes del Gobierno.
APORTACIONES
Puig anunció en el debate de política general que destinarán más ayudas a la cerámica. El conseller de Econo
mía, Rafa Climent, especificó que se trata de 180 millones de euros en forma de crédito para aportar liquidez al sector. «Además, trabajaremos con la dirección general de Industria para ofrecer otras aportaciones en ayudas directas», dijo, algo que dependerá de las partidas del próximo presupuesto de la Generalitat, que aún está por cerrar, para su aplicación a partir del 2023.
Desde el sector están a la espera de conocer los detalles de las medidas. El secretario general de la patronal cerámica (Ascer), Alberto Echavarría, comentó que quieren ver «cómo se van a concretar». El president de la Generalitat se reúne hoy con directivos de Ascer para «ver las oportunidades que existen con el fin de ayudar al máximo», incidió, dentro del margen que posibilite la Unión Europea. Otro anuncio del jefe del Consell fue la petición de un PERTE de descarbonización de la cerámica, ya que los actuales planes estatales excluyen a este sector.
Castellón y la región italiana concentran el 90% de las producciones nacionales azulejeras