La banca propone concursos para llevar cajeros a 243 pueblos
En Castellón, a través de la Generalitat, ya han instalado 52 dispensadores Las entidades prefieren licitaciones en vez de máquinas de marca blanca
El Ministerio de Economía y la banca tienen previsto presentar en los próximos días –en principio, en lo que resta de semana o principios de la próxima– el plan de medidas en que llevan trabajando desde hace meses para mejorar el acceso a los servicios financieros básicos en la España vaciada. El principal punto que queda por cerrar es cómo se instalan cajeros automáticos en los 243 municipios de más de 500 habitantes (con unos 211.000 habitantes) que al cierre del año pasado no contaban con ninguna vía de acceso directo al efectivo. El sector financiero prevé proponer al Gobierno que se haga mediante concursos públicos, según ha podido confirmar este diario.
Fuentes financieras apuntan que el departamento que dirige Nadia Calviño transmitió al sector hace algún tiempo que prefiere una solución que pase por instalar cajeros de marca blanca, sin la enseña de ninguna entidad concreta, y pagados por todos los bancos en función de su cuota de mercado. Las entidades han explorado cumplir con esa petición a través de la empresa de servicios de medios de pago Redsys. Sin embargo, esta alternativa no gustaba a algunos bancos, particularmente entre los más grandes y de red más extensa, por lo que el sector tiene previsto proponer finalmente a Economía que se haga a través de licitaciones públicas.
MANTENER LA MARCA El argumento de dichas entidades es que, ya que tienen que asumir el coste, es justo que puedan poner su marca. Coordinado a través de sus patronales AEB, CECA y UNACC, el sector está ultimando los detalles de su propuesta, pero la idea es plantear que durante unos seis meses se convoquen los concursos, siguiendo el modelo aplicado desde hace tiempo en comunidades autónomas como la valenciana. Una iniciativa puesta en marcha desde la Agenda Valenciana Antidespoblament (AVANT) de la Generalitat valenciana y que mediante un acuerdo con CaixaBank ha beneficiado ya a más de 12.000 personas en la provincia de Castellón, donde se han instalado 52 cajeros.
También ofrecen que, si pasado ese plazo alguno de los 243 municipios se queda sin cubrir (algo que
consideran poco probable debido a su bajo número), se instale en ellos un cajero de marca blanca.
Otro punto relevante en este asunto es el reparto del coste de instalación y mantenimiento de los cajeros. La banca quiere que el sector público (bien el Estado, bien las diputaciones o ayuntamientos afectados) asuma parte de dicho coste y al menos garantice la disponibilidad de un espacio físico adecuado, las conexiones a las infraestructuras tecnológicas necesarias (como internet) y el cumplimiento de los requisitos de seguridad imprescindibles. En el sector, sin embargo, hay ciertas dudas de que Economía vaya a aceptar la fórmula propuesta para el reparto del coste.
Los trabajos se están ultimando en los niveles técnicos de las patronales y con los del ministerio, pero está previsto que el plan se anuncie tras una reunión entre la vicepresidenta Calviño y los responsables de las patronales: Alejandra Kindelán (AEB), José María Méndez (CECA) y Cristina Freijanes (UNACC). En principio iba a ser el pasado martes, pero se aplazó. En el encuentro, la ministra también quiere tratar
con el sector la situación de los hipotecados tras la subida del euríbor, para quienes Economía ya estudia posibles medidas de apoyo a los más vulnerables.
ESTUDIO DE LAS PATRONALES Según un estudio presentado por las patronales encargado a Joaquín Maudos (catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Valencia y director adjunto de investigación del Ivie), el 54,4% de los municipios (4.422), donde reside el 3,3% de la población (1.555.688 habitantes), no cuenta con sucursal bancaria, aunque sí con alguna otra vía de acceso físico a los servicios más básicos (como los cajeros, los ofibuses o la red de Correos). En cambio, el 39,7% de los municipios (3.230) y 1,4% de la población (657.557 españoles) no tiene acceso al efectivo, con datos del cierre de 2021.
El plan que ultima el sector y Economía se centra en este último colectivo. Los municipios que no tienen ningún punto de acceso a los servicios bancarios son de tamaño muy pequeño (solo 204 habitantes de media, frente a 9.968 del resto de municipios), con una densidad de población muy reducida (6,1 habitantes por kilómetro cuadrado frente a 117,8) y de carácter mayoritariamente rural (lo son el 99,3%, frente al 73,3% del resto). El problema se concentra en provincias como Zamora, Salamanca, Palencia, León, Burgos, Soria, Guadalajara, Ávila, Cuenca, Segovia, Lleida, Valladolid, Navarra, Cáceres, Huesca, Teruel y Girona.
Además de la instalación de los cajeros en los municipios de más de 500 habitantes (en un principio la banca lo planteó en los de más de 700), el plan incluye medidas como ampliar la flota de oficinas propias móviles (los ofibuses); incrementar el número de agentes financieros (persona o empresa que actúa por cuenta de una entidad sin pertenecer a la misma); y alcanzar más acuerdos de cashback, es decir, de retirada de efectivo en establecimientos comerciales como gasolineras y farmacias.
Asimismo, como adelantó este diario, el sector alcanzó antes del verano un acuerdo con Correos para poner a disposición de las entidades su servicio Correos Cash, que permite realizar retiradas e ingresos de efectivo en los 4.675 puntos de atención y a través de 6.000 carteros rurales de la empresa pública postal.