Salvemos la costa
El pasado martes se celebró el Día Internacional del Turismo. Una jornada que sirvió para poner en valor y destacar el importante papel que tiene el turismo en nuestra economía local. También, para reflexionar cómo abordar la necesidad de proteger y salvaguardar nuestro principal recurso natural como son nuestras playas.
En Benicàssim lo hacemos destinando recursos e invirtiendo económicamente en un turismo limpio y sostenible, pero también incidiendo en campañas de concienciación a modo de responsabilidad compartida entre administración, vecinos y visitantes, a través de campañas activas y recogidas selectivas de aquellos residuos que alteran el equilibrio del ecosistema de nuestras playas, cumpliendo con la Agenda Local 2030 y avance en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, marcados por la Unión Europea.
Nuestro reto es seguir trabajando por un turismo más sostenible, competitivo e inclusivo que permita un desarrollo económico responsable cuidando y respetando el entorno y nuestra costa. Pero para lograrlo necesitamos la implicación de todas las administraciones colaborando con el mismo objetivo. Por eso en el pleno municipal hemos vuelto a reivindicar al Ministerio de Transición Ecológica, dependiente del Sr. Sánchez, una actuación rápida, decidida y contundente que evite la desaparición de una de nuestras playas, la playa del Heliópolis.
Y esta vez no iremos solos los grupos políticos, sino de la mano de vecinos afectados que se unen a nuestra exigencia para reclamar una solución definitiva para el litoral del Benicàssim y que se ejecute, cuanto antes, un Plan Integral de Protección de la costa en nuestra provincia. No somos un caso aislado; somos muchos los municipios que vemos con impotencia como la regresión del mar afecta a nuestras playas y no nos resignarnos a verlas desaparecer.
Lamentablemente, el azote de temporales en Castellón ha dejado de ser algo excepcional, poniendo de manifiesto los efectos del cambio climático, la fuerza de la naturaleza y la fragilidad de nuestras costas. Por eso, no hay tiempo que perder y es necesario actuar ya, porque la regresión de la costa se agrava haciendo peligrar una de nuestras principales playas, la del Heliópolis a la que no queremos, ni debemos, renunciar.