El asesino se ensañó en tórax y cuello con un cuchillo de cocina
Muerto también el autor tras ahorcarse, la justicia cerrará el caso sin responsabilidad penal posible La alcaldesa, Begoña Carrasco, urge a las víctimas a denunciar «para poder protegerlas de esta lacra»
Nicola Lupo, de 54 años, fue asesinada con un cuchillo de cocina de unos 20 centímetros de hoja y recibió puñaladas en el cuello, el tórax, en los brazos y en otras partes del cuerpo. Su verdugo fue su pareja sentimental, de 52 años, quien se ahorcó después de acabar con la vida de la mujer, como avanzó Mediterráneo en exclusiva el mismo viernes por la tarde.
Para la Policía Nacional y también para la justicia, se trata de un caso casi cerrado. Y es que, muerto el autor del crimen, la responsabilidad penal queda extinta.
El Juzgado de Instrucción número 6 en funciones de guardia se hizo cargo del caso el viernes, aunque está previsto que derive la causa al Juzgado de Violencia sobre la Mujer en los próximos días. Asimismo, la autopsia se le practicará a la fallecida previsiblemente mañana en el Anatómico Forense.
No es, ni mucho menos, la primera vez que una terrible muerte violenta deberá archivarse por la muerte del autor. Ya pasó con el rapto y posterior asesinato machista de Andrea Carballo en Vilareal (víctima y asesino murieron tras estrellar él el coche contra una gasolinera en Benicàssim) o con el doble parricida Ricardo Carrascosa en Castelló (se lanzó al vacío tras asesinar a sus hijas, de dos y seis años, con un hacha mientras dormían en sus camas).
La alcaldesa de Castelló, Begoña Carrasco, expresó ayer su enérgica repulsa por el crimen de género e incidió, en declaraciones a los medios, que «cuando la justi
cia debe actuar, llega tarde», haciendo hincapié en la necesidad de «prevenir», «educando en valores a nuestros hijos, en igualdad, para combatir esta lacra social».
Asimismo, la munícipe de la capital animó a todas las mujeres que sean víctimas de violencia de género a que denuncien para que puedan «protegerlas». Carrasco informó de que Castelló realizará un minuto de silencio por su vecina asesinada cuando la Delegación del Gobierno confirme oficialmente que se trata de una muerte por violencia machista.
En la misma línea se pronunciaron ayer desde el Ayuntamiento de Almassora, que envió un comunicado de condena, pues Nicola Lupo, enfermera de profesión, había trabajado durante el pasado verano en la residencia municipal de la tercera edad Vicente Vilar Morellá (actualmente realizaba sustituciones en el Hospital de la Plana de Vila-real). La alcaldesa, María Tormo, prevé decretar un día de luto oficial por ser una trabajadora municipal.
Begoña Carrasco ALCALDESA DE CASTELLÓ «La justicia llega tarde. Hay que prevenir, desde la educación, y hay que denunciar»