La gran fuerza del pequeño comercio
Acabamos de concluir una nueva y exitosa edición de la Fira de Sant Miquel, un evento anual que destaca por su atmósfera de reencuentro tras el periodo vacacional y que ofrece a los asistentes una experiencia inolvidable. Miles de ondenses y de visitantes hemos podido disfrutar durante todo el fin de semana de la atención personalizada y amable del pequeño comercio ondense y de nuestra exquisita gastronomía local, así como de un sinfín de actividades preparadas para todos los públicos y gustos. De este modo, en la zona de la Plaza del Raval se han instalado diferentes expositores en los que se han podido comprar productos del pequeño comercio ondense y disfrutar de la gastronomía local en la zona de La Miqueleta.
Esta edición ha contado también con la novedad de la presentación de la marca gastro turística Pastís d’Onda, que ha incluido además talleres de elaboración del típico producto para los más pequeños o un showcooking con productos de Castellón integrados dentro de la marca Castelló Ruta de Sabor.
Hosturionda y Onda Centre Comercial se han volcado para que esta nueva edición de nuestra Fira de Sant Miquel fuera sensacional y lo han logrado con creces. Hay que reconocer el mérito de las decenas de comercios que han participado en la Feria ofreciendo lo mejor de sus productos y de la hostelería local que ha dado una muestra, una vez más, de su gran profesionalidad.
Nos sentimos profundamente orgullosos de nuestro comercio local y de nuestros profesionales de la hostelería. El Ajuntament d’Onda siempre ha estado a su lado y lo va a seguir estando porque las tiendas de nuestros barrios son el gran corazón de la ciudad, representan su verdadero latido.
Durante la terrible pandemia inyectamos más de tres millones de euros de fondos propios para ayudar a que nuestros comercios, pequeñas tiendas, restaurantes, cafeterías y autónomos pudieran hacer frente a sus gastos en un momento en el que estaban cerrados y no podían trabajar con normalidad y generar ingresos. Esa fue, sin lugar a dudas, la mejor decisión que tomamos: ayudar a las personas y colocarlas en el centro y la razón de ser de toda acción política. Así, ayudándoles a pagar todos sus gastos y eximiéndoles del pago de tasas e impuestos pudimos darles un pulmón que hace que hoy nuestro pequeño comercio y nuestra hostelería gocen de una gran fortaleza. Pasear por Onda es reconfortante ya que todos sus comercios están abiertos y con una actividad efervescente. Cada día, además, se suman nuevos emprendedores que suben su persiana con ilusión y con ganas de trabajarse un futuro.
TOMAR LA DECISIÓN
de ayudarles durante la pandemia del covid hoy da sus frutos en forma de escaparates llenos de luz y de vida, de tiendas repletas de productos y de clientes y de una gran actividad económica. El comercio local es el termómetro que marca la salud de nuestros pueblos por eso hay que mimarlo. Escaparates con luz son el sinónimo de un pueblo vivo. Larga vida a nuestro pequeño comercio.