La escasez de mecánicos pone contra las cuerdas a 600 talleres de Castellón
Las empresas se ven obligadas a traer mano de obra de Perú o Colombia
Una empresa de automóviles de ocasión con sede en Almassora busca mecánico. Ofrece un contrato indefinido, jornada de lunes a viernes y un sueldo que oscila entre 20.000 y 30.000 euros brutos al año. Otra compañía, esta vez en Onda, también precisa incorporar a su plantilla un mecánico. ¿Las condiciones? Un contrato a jornada completa y un salario de 1.900 euros al mes. Se trata solo de dos ofertas de empleo publicadas en las últimas semanas en los principales portales de internet y que evidencian un problema que en Castellón va claramente a más: el déficit de personal al que se enfrentan los talleres y que está poniendo contra las cuerdas a un sector que mueve miles de euros.
Aunque la falta de mano de obra se asociaba hasta ahora a actividades como la hostelería, el transporte, la fontanería o la carpintería, a la lista se suman los talleres de automoción. «Encontrar trabajadores es prácticamente una misión imposible. Hay muy pocos jóvenes que quieren dedicarse a esta profesión y el déficit es cada vez más abultado», explica Pablo Colom, gerente de la Asociación de Talleres Reparadores de Automóviles y Otros de Castellón (Astrauto), que estima que en estos momentos hacen falta en la provincia entre 80 y 100 mecánicos, chapistas o pintores.
Para intentar hacer frente al déficit de profesionales que existe tanto en Castellón como en el conjunto del país, algunos talleres de la provincia han iniciado los trámites para importar personal de países como Perú o Colombia, aunque esta opción se presenta llena de obstáculos. «El problema es que desde que se inicia la solicitud hasta que llega el trabajador pueden pasar, como mínimo, cuatro meses», reconoce Colom que añade que la vivienda es otro de los handicaps. «Si traes a un trabajador de fuera tienes que facilitarle una casa y, conforme está la oferta de alquiler en este momento, no resulta nada fácil», dice.
SIN RELEVO GENERACIONAL El problema al que se enfrentan los cerca de 600 talleres de Castellón es mayúsculo y como consecuencia de la falta de trabajadores ya hay negocios que se cierran por falta de relevo. «Hay establecimientos que funcionan bien y que bajan la persiana porque el dueño se jubila y no encuentra quien le sustituya», apunta el gerente de Astrauto que avisa que, si la falta de profesionales no se soluciona más pronto que tarde, el cliente acabará pagando las consecuencias. «Llegará un día que llamarás al taller y te darán cita para dentro de varias semanas porque no te van a poder atender por falta de mecánicos o chapistas», advierte.
Además de fichar a profesionales de fuera del país, los empresarios de Castellón están explorando otras vías para intentar encontrar trabajadores. De hecho, recientemente han mantenido contactos con la dirección de Labora con el objetivo de atraer personal. «De lo que se trata es de dar visibilidad a un sector que ofrece un empleo estable, para toda la vida, y con un buen salario», argumenta Pablo Colom.