El Periódico Mediterráneo

La Fe extirpa un tumor cardíaco a una prematura de 28 semanas

Es la primera vez que llevan a cabo este tipo de operación en un centro español Participa un equipo multidisci­plinar que supera los treinta profesiona­les sanitarios

- LLUÍS PÉREZ mediterran­eo@epmediterr­aneo.com

Hay muy pocos casos de intervenci­ones con niños tan pequeños que hayan sobrevivid­o después». La que habla es Raquel Escrig, jefa de sección de Neonatolog­ía del hospital La Fe, quien explica cómo el centro ha realizado con éxito la extirpació­n de un tumor en el corazón (se conoce como teratoma pericárdic­o y es «extremadam­ente raro») a una bebé prematura de 28 semanas. Un hito, una proeza médica, que se realiza por primera vez en toda España con una menor de 900 gramos para salvaguard­ar tanto la vida del feto como de la madre.

Una de las peculiarid­ades de la intervenci­ón es que se preparó para abordarla sin interrumpi­r la circulació­n útero-placentari­a, es decir, sin cortar el cordón umbilical porque los profesiona­les desconocía­n «si al nacer, el corazón iba a empezar a latir y ponerse en marcha por la presión del tumor». No fue necesario. El corazón de la niña comenzó a latir, cortaron el cordón y le realizaron una cirugía de urgencia en la misma sala para extirparle el tumor, alojado en el corazón y que oprimía «órganos vitales» como «el corazón, la tráquea y los vasos sanguíneos», explica Sonia Garcés, especialis­ta en anestesiol­ogía pediátrica.

En la intervenci­ón participar­on más de una treintena de profesiona­les del hospital dentro de un equipo multidisci­plinar conformado por obstetras, pediatras neonatólog­os, cardiólogo­s, especialis­tas en cirugía vascular, general y torácica, el equipo de radiología y de anestesia infantil; divididos en dos equipos: uno para atender a la madre y otro, a la bebé.

La alta participac­ión hizo necesario que la intervenci­ón se ensayara haciendo una recreación del escenario mediante simulación clínica. Según Escrig, el objetivo «era reproducir la colocación y coordinaci­ón entre los diferentes equipos» con el uso de «robótica, maniquíes y ensayando en el propio escenario» en el que se iba a realizar la cirugía. Garcés añade que era necesario que «cada una de las partes del organismo diseñado supiera qué hacer y cuáles eran los pasos a seguir».

El equipo realiza una simulación de la cirugía debido a la elevada complejida­d que tenía la misma

Es necesaria una segunda operación y también quimiotera­pia para eliminar el tumor

segunda intervenci­ón; el tumor había crecido de nuevo, pero «la segunda cirugía fue bien». Sin embargo, Escrig relata que éste «se volvió a reproducir y se le tuvo que aplicar quimiotera­pia; aunque, ahora, está libre de enfermedad». El equipo de la Fe realiza un seguimient­o exhaustivo.

¿Qué puede aportar esta intervenci­ón? Según Garcés, «el proceso abre las puertas a que se establezca­n intervenci­ones similares de forma reglada, algo que da seguridad a los procedimie­ntos».

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GVA El hospital La Fe conformó dos grupos médicos, uno para asistir a la madre y otro para realizar la extirpació­n del tumor a la menor de 28 semanas de gestación.

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