La popular cabalgata pone el punto y final a las patronales de la Vall d’Uixó
Tania Baños incide en el objetivo de «seguir siendo un referente en temas de seguridad» El último embolado embistió a un hombre, que sufrió quemaduras y varias laceraciones
Todo lo bueno llega a su fin, y en ese punto se encontraron ayer en la Vall d’Uixó, con el último día de las fiestas patronales de Sant Vicent. Cada paso dado durante la jornada final emanaba esa combinación de emociones, de despedida y satisfacción, la que da saber que, aunque siempre se puede mejorar, cada convocatoria ha reunido a los vecinos, ha atraído a visitantes y ha sido una exhibición pública de cómo esta ciudad vive y comparte sus tradiciones.
ENHORABUENA La alcaldesa, Tania Baños, que felicitó a la comisión por su implicación y el esfuerzo colectivo, admitió que «uno vuelca muchas ganas y meses de trabajo para que las cosas salgan lo mejor posible, y a veces suceden cosas como el susto del último embolado o el triste incidente taurino que tanto nos preocupó el primer sábado». Desde su punto de vista, en momentos como el de la primera cogida, la más grave, se constató «la importancia que tiene la apuesta por la seguridad, contar con medios a la altura de los riesgos y aplicar unos protocolos que garanticen una rápida respuesta, que al final salva vidas».
Baños destacó el compromiso y profesionalidad del equipo sanitario e insistió en que «debemos esforzarnos por seguir siendo un referente autonómico en este aspecto, para que los incidentes tengan el mejor desenlace posible».
Pero las fiestas han sido mucho
más que toros, y en todo lo que de positivo han supuesto quiso centrarse al decir que «el movimiento que han generado ha sido evidente, lo hemos visto y sentido en los actos centrales, en los que la participación se ha podido valorar a
simple vista y eso es bueno para todos, desde el punto de vista social, pero también económico».
El acto central de ayer fue la cabalgata con la que la comisión despide cada año su programa , en la que participaron y a la que
asistieron numerosas personas.
Sobre la cogida de este sábado, en la embolada del segundo Victoriano del Río de la peña El 22, posiblemente el mejor de la semana, un conocido aficionado no fue capaz de escabullirse de la poderosa
persecución del toro. En su huida, trastabilló ligeramente, lo que facilitó el alcance y que sufriera hasta dos embestidas. Por fortuna, sin más consecuencias que los dolorosos impactos, quemaduras y diversas laceraciones sin traslado.