El primer gran incendio de la temporada en la Comunitat amenaza la Marina
El fuego forestal que se produjo entre Tàrbena y Xaló seguía sin control anoche Obligó a desalojar a alrededor de 60 personas en las localidades afectadas
La temporada de incendios apunta a ser larga y complicada en la Comunitat Valenciana. El segundo fin de semana de abril, en el que se han registrado temperaturas en torno a diez grados por encima de la media histórica que se han sumado a vientos racheados, unos índices de humedad bajos y a unos montes secos por la falta de lluvias, es el primer aviso de un cambio de tendencia en el que insisten los expertos y que resulta cada vez más evidente.
En las últimas 48 horas se han registrado al menos siete incendios de diversa gravedad en la autonomía, con la Marina como epicentro. Si el sábado un fuego cerca del Montgó obligó a desalojar a centenares de personas de Xàbia y Gata y quemó unas 200 hectáreas hasta que fue estabilizado, ayer se desató un nuevo fuego a poco más de 40 kilómetros de esa zona, en la Serra de Ferrer, en Tàrbena. A diferencia de los anteriores, este afectó a terreno forestal. Al cierre de esta edición, y según la información facilitada por delegación del Gobierno tras la última reunión con los responsables de la extinción, las previsiones sobre la evolución del incendio durante esta noche eran alentadoras.
Emergencias movilizó seis medios aéreos desde el primer momento, pero la complicada evolución obligó a solicitar la colaboración de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y del Ministerio de
Transición Ecológica, que movilizó dos hidroaviones desde su base de Torrejón de Ardoz. Se desplegaron también diez dotaciones de bomberos de la Diputación de Alicante y siete unidades de bomberos forestales de la Generalitat.
En paralelo, y ante el avance de las llamas, Emergencias optó por desalojar a las personas residentes. No se aportaron cifras oficiales, pero algunas fuentes hablaban de 60 desalojados en 40 inmuebles. Cruz Roja habilitó un albergue en Tàrbena. Ante la preocupante evolución del incendio se desplegó en la zona el Puesto de Mando Avanzado (PMA) y comenzaron las reacciones políticas. El president, Carlos Mazón, expresó en Twitter su «preocupación» y la consellera de Justicia, Elisa Núñez, se desplazó al lugar. Desde allí, la máxima responsable de las Emergencias explicó que la orografía y las altas temperaturas agravaron la situación. Algo que contrasta con el nivel de preemergencia decretado ayer por el departamento que dirige, que fijó el nivel de riesgo más bajo. Núñez cargó contra el anterior Consell, criticando la «gran masa forestal» existente en la zona, la cual achacó a la «negligencia» del Botànic.
Por el momento el origen del fuego se desconoce, si bien algunas informaciones apuntan a una quema agrícola descontrolada.