Descubren que Picasso tuvo una hija con la modelo Germaine
El profesor de Historia del Arte Pedro Marfil examina, a través de decenas de lienzos y dibujos del genio cubista, esta relación
Pablo Picasso podría ser el padre de la hija de la modelo Germaine Gargallo, según sostiene el profesor de Historia del Arte Pedro Marfil en un detallado artículo de investigación publicado en febrero pasado por la Universidad de Córdoba (UCO). El autor llega a esa conclusión tras examinar decenas de lienzos y dibujos realizados por el artista malagueño en la primera década del siglo XX. En Germaine Gargallo, a propósito de su relación con Picasso y la influencia en su obra, Marfil sostiene que el vínculo amoroso entre ambos fue más largo de lo que la historiografía había determinado hasta ahora y que, además, la modelo dio a luz una niña atribuida formalmente al pintor Ramon Pichot.
Picasso y Germaine se conocieron en septiembre de 1900 en un viaje que el malagueño hizo a París cuando apenas tenía 18 años. Varias cartas del creador cubista, según indica Marfil, atestiguarían un primer encuentro del también pintor Carles Casagemas y Picasso con tres jóvenes parisinas, entre las que se encontraba Germaine. Poco después, Picasso, Casagemas y Manuel Pallarès compartieron estudio en la capital gala junto a Germaine, Odette y Antoinette, según indica el biógrafo John Richardson.
Casagemas y Germaine mantuvieron una tórrida relación amorosa en aquellas semanas y así lo certifican cartas privadas del pintor catalán. El idilio concluyó de manera trágica. El 17 de febrero de 1901, en el transcurso de una cena en el Café de l’Hyppodrome de París, el joven y enigmático artista catalán protagonizó una dantesca escena que acabó con su suicidio delante de Germaine, Pallarès, Antoinette y Manuel Hugué. Según testigos presenciales, citados por Marfil en su artículo, Casagemas se levantó, introdujo una mano en el bolsillo y sacó una pistola. Germaine se agachó y Hugué se abalanzó sobre Casagemas, que se llevó el arma a la sien y disparó.
Impacto en Picasso
El siniestro suicidio impacta profundamente en Picasso, que inmortalizó a su amigo en los cuadros La vida y Entierro de Casagemas. Después de una breve estancia en Málaga y Madrid, el pintor malagueño se traslada nuevamente a París y se instala en el mismo estudio de Casagemas junto al marchante Pere Manyac. Fue en esas semanas cuando su relación con Germaine se intensifica. Aunque el primer óleo con la modelo data de 1900, a finales de mayo de 1901 vuelve a retratarla en un dibujo al carboncillo sobre papel titulado Buste de femme.
De ese mismo mes, están fechados otros dibujos de Germaine. Una carta de Miquel Utrillo de junio de 1901 ya constata la relación amorosa entre el artista y la modelo, que al contrario de lo que se pensaba llegó hasta 1904.