No traten de salvar algo de lo que carecen
Nuestra hija pequeña tiene 22 años, actualmente está estudiando la carrera de Humanidades y ya ha acabado Periodismo en la UPF. También está cursando el cuarto curso del idioma ruso en la Escuela Oficial de Idiomas y trabaja en una empresa. Lo que digo es real y demostrable fehacientemente. Todo esto, además de llenarnos de orgullo, nos ocasiona una inquietud puesto que, como padres, vemos el enorme esfuerzo que le cuesta a nuestra hija lo que está consiguiendo. El año que viene, una vez haya finalizado sus estudios, desea hacer un máster para completar su formación, y es aquí cuando llega el motivo de todo lo expuesto.
Me gustaría pedirle a la señora Cristina Cifuentes y a todo su grupo de amigos que, ya que en este Estado todos somos iguales ante la ley, me facilite las instrucciones para que mi hija pueda tener su ansiado máster sin tener que asistir a clase ningún día, sin tener que examinarse y poder ver que encara su vida con más facilidad de la que hasta ahora ha tenido. Y digo todo esto en tono jocoso, ya que entiendo que es imposible
sus errores para que los jóvenes vean el camino correcto del reconocimiento
que la citada señora pueda responderme. Pero en tono más serio, le pido a ella, a sus amigos y a sus defensores que tengan la decencia de admitir sus presuntos errores, prebendas y mentiras para que todos los jóvenes que están ganándose una plaza en el futuro de cualquier profesión con su esfuerzo personal, económico y sin trampas, vean que ese es el correcto camino para conseguir el reconocimiento de la sociedad y profesional. Y que dejen de tratar de salvar su honor, dignidad y buen nombre, ya que no se puede salvar algo de lo que se carece.