Los vecinos colman de flores a la patrona en la víspera del día grande de Almassora
A la ofrenda no b faltan entidades de la localidad y otras de municipios vecinos Las representantes b de otros años se unen a la reina y las damas de este ejercicio
Almassora llenó de flores la imagen de Santa Quitèria. Como cada víspera del día grande de las fiestas en su honor, el de Les Calderes, los vecinos agasajaron a la patrona con flores en el traslado.
La ofrenda comenzó a las 20.00 horas desde la iglesia del Santísimo Cristo, una procesión en la que centenares de fieles acompañan a la talla hasta la parroquia de la Natividad. El tapiz confeccionado por los Scouts Almassora en la fachada fue tomando forma con la llegada de los primeros participantes y de sus ramos.
Los niños de Scouts Tramuntana, El Bres y La Llimeta abrieron el colorido pero regio desfile, seguidos de hasta 22 peñas: El Porrat, El Trasto, Barrilet, El Polp, El Nuk, Clafidors, La Placeta, Bugs Bunny, 12 i prou, El Pati, Penjats, San Fermín, Penya La Colla, El Rollet, Pirula, El Racó, Mig a Mitges, l’Embolic, El Gavell, l’Emboscà, Aficionades Taurines d’Almassora y La Travessa.
Entre los colectivos locales tomaron parte en el acto los clubes de patinaje Santa Quitèria, Rollers y Patí, así como Tambors de Passió, El Torrelló, l’Associació Moros i Cristians d’Almassora, Lluïsos Almassora, la peña valencianista y las asociaciones de jubilados y pensionistas Pla del Calvari, Fátima y Santiago Apóstol. A ellos se sumaron niños y niñas de comunión, Lluïsos Almassora y embajadores de otras ciudades, como las fallas Centro España y Barrio Valencia de Burriana.
Como es tradicional, las representantes festivas de otros años volvieron a vestirse con el traje regional. Es el caso de las reinas Laura Alguacil (2013), Marta Gargallo (2016) y Paula Cubertorer (2017), acompañadas por sus respectivas damas. Como de costumbre, fue invitada la corte de honor de hace 50 años, al igual que la reina de 1993, Victoria Eugenia Vilar y sus damas en el 25º aniversario de reinado.
La Junta de Damas de Santa Quitèria y Virgen del Rosario, de riguroso negro, precedieron a la peana. Tras ella, cerraron la procesión las damas del 2018 y la corporación. La alcaldesa, Merche Galí, acompañó a la reina, María Portalés, con la teniente de alcalde Susanna Nicolau. Las representantes festivas, junto a entidades locales, destilaron con sus ramos para honrar a la patrona. La reina de las fiestas y su corte, con la alcaldesa en la iglesia. El tapiz iba tomando forma a medida que llegaban los participantes. Las niñas de la primera comunión, protagonistas. El inmenso fervor por Santa Quitèria tomó las calles.