UN GUIÑO BUCÓLICO A LOS AÑOS 50 Y 60 DE HOLLYWOOD
Un viejo vecino sigue jurando que vio a Marilyn Monroe, el gran mito erótico de los cincuenta, entrar y salir discretamente de la casa hace ya demasiados años. No sabemos el porqué de sus visitas, ni siquiera la veracidad de éstas pero, sin duda, hoy permanece el recuerdo en este hogar californiano de una estética bohemia (no confundir con La Bohème de Montmartre pues poco tiene que ver) que junto al ecléctico mix de piezas vintage de mediados de siglo provocan la sensación de colarse en una película, ya en color, de los años 50 o 60 protagonizada por Paul Newman, Cary Grant o Humphrey Bogart. La simpática Holly Golightly no se colará por la ventana y no encontrarás a Sabrina sentada en el sofá crema de Adrian Pearsall, sin embargo, ( y si sirve de consuelo), un icónico Mustang fastback del 67 estará aparcado entre cactus y palmeras, rodeado de un paraje sin parangón donde soñaríamos con ver el atardecer o meditar con vistas a la naturaleza salvaje del Benedict Canyon. El fotógrafo de moda y director, Jonathan Lennard, renovó esta inusual casa situada en el barrio más famoso de la pequeña pantalla, ¿quién no recuerda la serie Sensación de Vivir? Pero nada empezó en Beverly Hills 90210. Fue una sesión de fotos con una (muy) joven Julia Roberts lo que situó a Lennard en el mapa de Hollywood. Recientemente ha terminado de rodar tres fashion short films: