ASIENTOS CON CHARME
1. Conjunto de sillas isabelinas, 180 €/cu, y butaca Napoleóniii, 600 €, todo en El Anticuario de Belén. 2. Børge Mogensen creó, en 1950 para la exposición Copenhagencabinetmarkersguild, la butaca The Hauntingchair, con estructura de roble y asiento de cuero natural, 70,5x87x67 cm, 4.652 €, de Fredericia en Batavia. 3. La Ruta de la Seda XVI se titula el cuadro de Jaume Plensa, del 2016, realizado en técnica mixta sobre papel, 112x238 cm, c. p.v., en L. A. Studio. 4. Ionna Vautrin firma la colección de cerámica Bec, formada por Seagull,toucanyduck, 485 €/cu, de Bosa en Concepto DR. 5. En marquetería danesa está hecha la cómoda del siglo XVIII, 1.700 €, en Luno Antigüedades. 6. Primera versión de Polygon, de Numen/foruse, producida por Prostoria en 2014, 1.223 €, en Batavia.
1. Ettore Sottsass firma la copa y jarrones de Bitossi Ceramiche, desde 304,92 €, en Batavia. 2. Octogonal es la forma de la mesa velador Francia años 40, en madera de teca ebonizada y tapa en pergamino con faux de bambú, 130x80 cm, 4.200 €, en L. A. Studio. 3. Todos los nocturnos de Villaurrutia III es el título de esta obra de 2016 del mexicano Jorge Méndez Blake, 260x200x5 cm, c. p.v., en Travesía Cuatro. 4. Motivos chinescos ilustran esta cómoda panzuda con sobre de mármol, 8.000 €, en Anmoder. 5. Un icono de la modernidad, el modelo Lady, diseñado por Marco Zanuso en 1951, supuso una innovación porque fue la primera butaca en la que se fabricaron las piezas por separado para luego ensamblarlas, desde 2.180 €, edita Cassina.
1. Cristal soplado forma la base y el difusor de la lámpara Glamt3, obra de Luc Ramael en 2005 para Prandina, 1.573 €, en Años Luz. 2. Consola de estilo holandés, 1.200 €, en Berenis. 3. Lynne Collins firma esta fotografía de la colección Thetres-passer15, 100x150 cm, 1.859 €, en Lumas. 4. Pelican Chair se llama esta butaca que nace en 1940 de la fascinación por el surrealismo de Finn Juhl, que reedita Onecollection, 85x76x68 cm, 5.362 €, en Batavia. 5. Chaise longue Napoleón III, 1.050 €, en El Anticuario de Belén. 6. Una pintura al spray es la técnica utilizada por el mexicano José Dávila en su obra Acopyisameta-original (FIG.51)IV, del año 2016, 107,5x127 cm, c. p.v., en Travesía Cuatro.
Empezar por el principio Por el arte antiguo, por piezas arqueológicas. Hoy Dries van Noten - como antes fue Yves Saint Laurentes un gran admirador de piezas que convivieron con egipcios, griegos o romanos. Este
que data de 490 a. C. y está disponible en
Pero también hay galerías especializadas como J. Bagot (en Barcelona) o Ars Historica (en Madrid). ción, “Colección Alicia Koplowitz” en el Museo de Bellas Artes de Bilbao. Aquí el gusto de su propietaria -2.328 millones de euros de patrimonio neto según la Lista Forbes 2017crea un interesante manifiesto feminista reuniendo en un mismo espacio -o en su mansión de La Moraleja, nos imaginamos- la cabeza de una reina griega del siglo III a. C., una maja y una celestina de Goya, una pelirroja de Amedeo Modigliani o un retrato de mujer de Picasso. Solo un pero, ¿por qué en el catálogo han optado por un orden cronológico evitando confrontaciones, diálogos?
ESCENA III “Las piezas son las que deben hablarte”, afirma contundente Désiré Feuerle. No hay cartelas, ni datos de su procedencia en una sala gigante casi en penumbra. La luz puntual te va presentando a todos los invitados. Por aquí, unas esculturas de bronce del siglo VII al XIII del Imperio de Angkor (ahora, Camboya). Allí, mobiliario chino en mármol blanco o madera de los siglos XVI y XVII. Y al fondo, unas fotografías de Nobuyoshi Araki (Tokio, 1940), un Anish Kapoor (1954) o un Cristina Iglesias ( 1956). “Todas, en su momento, fueron arte moderno, se adelantaron a su tiempo, y las sensaciones que transmiten son similares a las del arte actual que las acompañan, por eso están juntas”, comenta este genio de la “yuxtaposición”. Kapoor también añade, “para el ojo moderno, las esculturas de Angkor parecen presentar una forma simplificada, surgiendo de una visión que enlaza la modernidad con un pasado antiguo, quizás arcaico. Uno imagina una unión que se alarga directamente hacia Brancusi y más allá”. La Colección Feuerle está en Berlín, en un antiguo búnker con muros de 2 metros de ancho, intervenido - o mejor, restaurado- con mimo por John Pawson. En este momento, recuerdo una frase de Lord Foster en el último ( y magnífico) Esquire, “necesitamos el pasado para fabricar el presente”. Pues eso, ¡ vivan los viejos… los viejos maestros!