La impactante arquitectura de esta vivienda romana la firma Massimo D’alessandro.
Este singular apartamento de dos plantas se encuentra en el barrio EUR en Roma. Una zona muy conocida en Italia después de salir en películas tan icónicas como “El eclipse” de Miguel Ángel Antonioni o “El conformista” de Bernardo Bertolucci. Sería imposible no relacionar la arquitectura monumental del barrio EUR en general, y de esta vivienda en particular, con el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer y su manera de intervenir en arquitecturas rodeadas de naturaleza. Sus trabajos se convierten en una inspiración. Massimo d’alessandro, arquitecto y propietario de MDAA Studio, es el “culpable” de que el resultado de la reforma realizada en uno de los edifcios históricos de este barrio romano, sea de revista. El principal desafío era el de unir dos apartamentos independientes y convertirlos en un dúplex de 300 m2 donde el techo y el suelo fueran tratados de tal manera que se creara una fuerte conexión entre formas y texturas. De hecho, si paseamos por el apartamento, nos invaden las líneas geométricas tanto en plano, con cambios de color en el suelo, como tridimensionalmente, con la escultural escalera en espiral, los huecos en el techo conectando las dos plantas, las estancias curvas o los volúmenes del mobiliario. En la planta baja destaca el salón por encima de otras estancias. Es un espacio completamente abierto defnido por la abertura cenital que permite la invasión de luz, y por LA ESCALERA (con mayúsculas). El sofá curvo es una pieza preciosa de Federico Munari (1955), el sillón arlequín ( llamado Distex de Gio Ponti y diseñado para Cassina en1953, con tela original también diseñada por Ponti) y la mesa de centro con lente de vidrio, de Fontana Arte. Todo ese mobiliario y la decoración se ven inmersos en la luz del día procedente de los grandes ventanales que se asemejan a los propios cuadros, en tamaño y en encuadre. Y es que los propietarios son unos apasionados coleccionistas de fotografía, sobre todo si es social, y como resultado, las paredes están totalmente cubiertas por cuadros a gran escala de los principales artistas ( y activistas) contemporáneos. Nombres como Marina Abramovic, Nobuyoshi Araki, Robert Mapplethorpe, Nan Goldin y Vanessa Beecroft llenan las paredes de esta vivienda en Roma.
La zona del comedor está dominada por una lámpara de araña, de Johanna Grawunder, una obra de arte que muestra el gusto de los propietarios por otros elementos decorativos, no únicamente fotografías. Muestra de ello es también la escultura de la entrada de Alex Pinna. Un volumen hecho en bronce y hierro que cuenta un secreto si se le presta la sufciente atención. La parte más íntima de la casa queda relegada al segundo piso, donde las habitaciones destacan por su sencillez. Colores neutros como base y tejidos azules y grises, para ponerlo fácil en los momentos de descanso. La delgada línea entre hogar y galería de arte ha sido difuminada por Massimo d’alessandro.