Tu comedor, un espectáculo
“Aquí el gusto trasciende del paladar llegando al resto de los sentidos”
Si hay una cosa que la post pandemia está cambiando verdaderamente es nuestro lugar favorito para reunirnos: le hemos cogido el gusto a vernos en las casas particulares y, sí, es un auténtico placer. Con esto no quiero decir que restrinjamos nuestras visitas a restaurantes, ¡no hay más que ver con qué ganas los estamos llenando de nuevo!, pero sí a que hemos redescubierto la satisfacción que supone comer o cenar en una casa amiga, alargando los tiempos y disfrutando de un hábitat que se ha preparado con comodidad y detalle para atendernos en exclusiva. La privacidad es el lujo. Dos sectores del diseño han recogido este guante y ya están incorporando sus ideas a esta buena costumbre. Por una parte, está el comedor, cómodo, versátil, integrado en la cocina, -como magistralmente ha ideado la interiorista Inés Benavides en nuestro proyecto HOME ELLE-, o en el salón, ¡nunca más en una habitación ex profeso! y, por otra, las piezas para vestir la mesa de fiesta, un auténtico espectáculo de delicadeza y artesanía en el que la creatividad del anfitrión tiene mucho que decir. Con estas circunstancias, de repente, hemos visto que el espacio público y el doméstico se empiezan a mirar uno al otro, imitándose en lo mejor de ambos: los restaurantes suponen un gran escaparate de tendencias y las casas son el paradigma del bienestar, algo muy bueno está saliendo de esta simbiosis. Entre los primeros, hemos descubierto, y traemos a este número, a cuatro grandes locales donde el gusto transciende del paladar llegando al resto de los sentidos y, de los segundos, nos encanta la diversidad que presentamos, pequeños o familiares, de diseño, en el campo... siempre integrados en el proyecto de interiorismo de la vivienda en que se encuentran y dispuestos para que en ellos no solo se sirvan delicias, también pasen “cosas buenas” entre los afortunados que los disfruten.