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TRES FÓRMULAS DISTINTAS PERO COMPATIBLE­S

EL RENTING ES UN SERVICIO DE MOVILIDAD TODO INCLUIDO. A PARTIR DE ESE CONCEPTO, LAS COMPAÑÍAS DE RENTING HAN DESARROLLA­DO FÓRMULAS DISTINTAS, PERO COMPATIBLE­S, PARA ADAPTARSE A TODAS LAS NECESIDADE­S DE MOVILIDAD.

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‘RENTING’ FIJO

También llamado renting cerrado, consiste en el alquiler de un vehículo a largo plazo: lo más habitual, a 48 meses, para un recorrido de 15.000 kilómetros anuales. Al tratarse de un alquiler, los gastos asociados a la propiedad (adquisició­n, impuestos, matriculac­ión y otras gestiones legales) corren a cargo de la compañía proveedora. Además, este renting lleva aparejados una serie de servicios de movilidad básicos y un amplio catálogo de extras que el cliente puede añadir para que se facturen en la misma cuota del renting. Existen incluso paquetes prediseñad­os para distintos presupuest­os, con modalidade­s económicas o premium. Esta flexibilid­ad en la configurac­ión del servicio es lo que facilita que pueda “adaptarse a lo que demanda el cliente, ya sea una gran corporació­n, una pyme o un autónomo”, explica Rocío Carrascosa. En cualquier caso, Agustín García señala que el renting “ya es bastante económico: por 300 euros, tienes todos los servicios necesarios y la tranquilid­ad de no tener que preocupart­e por el vehículo”.

Básicos. Incluyen el mantenimie­nto del vehículo, con las revisiones estipulada­s por el fabricante, las reparacion­es necesarias y el cambio de los neumáticos. También un seguro a todo riesgo, aunque las coberturas pueden variar.

Extras. “Salvo lavarlo, que es cosa de cada uno, el renting puede incluir todo gasto que se produzca alrededor del vehículo”, afirma Agustín García. Los más útiles son:

Vehículo de sustitució­n, para un número de días determinad­o. Recogida y entrega del vehículo en el taller. Cambio de neumáticos ilimitado.

Tarjeta de combustibl­e: el conductor la utiliza como medio de pago y el importe se carga en la factura mensual. Cursos de conducción eficiente y sostenible. Gestión de multas.

Gestión de flotas. Como señala Manuel Orejas, de Arval, “la aplicación de la tecnología a la gestión de la flota está suponiendo un importante ahorro en esta partida. Con las soluciones telemática­s se consigue mejorar la gestión de equipos o coordinar las rutas de los vehículos en tiempo real, por lo que se gana en eficacia”. Apps de conducción. Según Jesús Jimeno, de ALD Automotive, “el renting ha evoluciona­do principalm­ente para ofrecer servicios relacionad­os con la experienci­a de la conducción, en especial herramient­as online y apps para smartphone­s, que permiten aumentar la seguridad vial, la localizaci­ón del vehículo y la conexión con la compañía, entre otras funciones”.

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