La digitalización multiplica los negocios
En este mercado global los consumidores buscan ofertas homogéneas pero agradecen también la personalización
El mes pasado hablábamos en nuestra revista sobre transformación digital. Al preparar el reportaje vimos las enormes oportunidades que ofrece este proceso en la gestión interna de la empresa. Ahora nos decidimos a hablar de las oportunidades de negocio que se abren y que son, si cabe, todavía más importantes en número y de más calado. Para los negocios, más que una transformación, estamos delante de una auténtica revolución.
En el dossier de este número avanzamos una serie de negocios concretos que están a punto de ser una realidad. Que están a punto de estallar, decimos. Si hacemos un ejercicio de síntesis, encontramos algunas tendencias generales comunes en la mayoría de ellos. La primera es que muchos de los grandes negocios de futuro son actividades, productos y servicios que han tenido demanda siempre y que ahora, con la tecnología, se hacen mucho más eficientes. En el consumo, la inmediatez se ha convertido en una fuerte exigencia prácticamente en todos los servicios y productos imaginables. Pronto habrá pocas compras de producto físico que no se entreguen en el día en las grandes ciudades y eso es un terremoto difícilmente abarcable para muchas las empresas. La confianza y la seguridad, dos conceptos que se mezclan habitualmente pero que distan mucho de ser lo mismo, se convierten también en un elemento crítico. El blockchain ofrecerá un gran avance en este sentido y, como siempre, además de la pura tecnología, el impulso de negocio llegará especialmente en los usos y derivaciones que se apliquen en productos, servicios y transacciones. La seguridad y la confianza son, cada día más, una obligación. Si las ofreces, puedes participar en el mercado, pero hay que decirlo: son condiciones necesarias, pero no suficientes.
Nos movemos cada día más en un mercado global, donde los clientes esperan ofertas homogéneas, y en el que al mismo tiempo agradecen que estén ajustadas a su perfil concreto. Suena a galimatías, pero ya estamos viendo buenos ejemplos de personalización masiva de productos. Toda una tendencia. Las nuevas circunstancias están produciendo una transformación también en el ecosistema empresarial. Las grandes empresas son capaces de cumplir con eficiencia estas exigencias, gracias a su volumen. Por contra, las pequeñas también lo logran gracias a la especialización. Mal momento para la clase media... Quedan por ver muchas cosas nuevas: economía circular, más productos valorizados, propuestas de bienestar más sofisticadas, más pelea por la atención del consumidor... Infinidad de retos para las empresas, lo que abre buenas perspectivas a un modelo que nos gusta: las empresas que dan productos o servicios a otras. B2B lo llaman.