Amancio Ortega: cuáles son sus frases más inspiradoras
¿Qué piensa uno de los hombres más ricos del mundo? ¿Cuál es su hoja de ruta para dirigir su negocio? Desgranamos el pensamiento de Amancio Ortega a través de su biografía.
Es el emprendedor español más conocido y admirado tanto dentro como fuera de España. Quienes hayan seguido la trayectoria de Amancio
Ortega conocerán sus principales hitos empresariales, sus ideas más brillantes y, por supuesto, sus frases más inspiradoras.
Desde los tranquilos pazos de Galicia, Amancio Ortega mueve los hilos de Inditex, un negocio textil que no para de ganar dinero. Hombre discreto, que no concede entrevistas a los medios, paradójicamente cuenta con amplio repertorio de frases, extraídas de la biografía escrita por Covadonga O’Shea, que hemos recopilado para este artículo. Esto es lo más cerca que se puede estar de él: a través de sus frases.
“Si he ganado tanto dinero ha sido porque mi objetivo no ha sido nunca ganar dinero”
“Mi tesoro… Gollum, Gollum, Gollum”. El Señor de los Anillos a veces nos ofrece sutiles paralelismos de la realidad. Gollum era una persona obsesionada con el anillo (dinero), que finalmente acabó perdiendo por centrarse en ese objetivo. La preocupación de un emprendedor no debe ser si gana poco o mucho dinero, sino poner todo su empeño en hacer su trabajo lo mejor posible. “Los resultados no son tan importantes, nunca los miro. Si acaso, al cabo de tres o cuatro meses, Pablo Isla (consejero delegado), me los enseña. Lo que hacemos es innovar y no mirar los resultados”, explica Ortega, para quien “no vale la pena ser empresario sólo para ser rico”, en referencia a las causas sociales que abandera a través de su Fundación. Recientemente ha donado 310 millones de euros a la sanidad pública española.
“Quiero soluciones inmediatas a los problemas”
La inmediatez, el verdadero problema de la sociedad actual. Todo es instantáneo. Las modas cada vez más cortas y los tiempos de trabajo más rápidos. Cuanto antes se pongan soluciones a un problema, mayor capacidad de reacción tendremos. “Lo que vale hoy, no tiene por qué valer mañana, lo más probable sea que no sirva para nada”.
“Yo no necesito consultores. ¿Van a conocer mejor nuestro negocio unas personas que no lo viven día a día como nosotros?”
A Amancio Ortega no le gusta externalizar sus negocios, aunque la polémica con las fábricas textiles en los países asiáticos es algo evidente, tiene por costumbre tener el control de toda su cadena de valor.
“El optimismo es negativo”
Ortega aboga por un pensamiento alejado de la autocomplacencia y más centrado en la crítica del propio trabajo. ¿Podríamos hacerlo mejor?¿Debemos confiarnos en que es un buen producto? Ortega propone estar siempre alerta porque el éxito nunca está garantizado.
“Lo importante es marcarse metas en la vida y poner todo tu empeño por hacerlas realidad”
Suena tópico, pero si te paras a pensar, ¿cuántas veces lo hemos dado absolutamente todo por cumplir un objetivo? Posiblemente habremos dado un 50% o 70%, pero no más. El sacrificio debe ser continuo y no rendirse jamás. Ese fue el camino de Ortega y el final ha sido una gran recompensa.
“Haz siempre lo que te guste”
Ortega delega los temas fiscales, de finanzas y de recursos humanos que no le gustan a personas más capaces. Él se involucra en lo que realmente le apasiona: la distribución y el producto. “Ahora lo estoy pasando bárbaro con las obras”, explica.
“Estoy informado a diario de lo que ocurre en cada tienda”
La información es poder. Cuando una empresa alcanza un gran tamaño, hay un montón de información que se dispersa, se pierde por el camino y el mensaje termina convirtiéndose en un teléfono escacharrado. Por eso, es importante centralizar la información de la empresa y no tener fugas.
“La calle es la gran pasarela”
La verdadera tendencia está en la calle. “Mi gran consejo a quien quiera hacer algo rompedor es que mire a la calle. Es la gran pasarela".