El negocio millonario
que surgió tras pedir un café para llevar
La historia de este negocio millonario comienza en el año 1991 en la ciudad americana de Portland. Un agente inmobiliario de poco éxito, Jay Sorensen, acudió a un bar para comprar un café para llevar durante su camino al trabajo. Debido a la alta temperatura del vaso, no pudo evitar derramarlo en sus piernas. Es entonces cuando se le ocurrió el invento que hoy es un negocio millonario que se utiliza en todo el mundo: el cartón que cubre a los vasos de café para llevar para evitar quemarse las manos. Pero, aunque parece una idea muy simple, Sorensen tuvo que hacer varias pruebas. Así, tras cuatro años de experimentación y 5.000 dólares en la patente, en 1995 nacía el Java Jacket.
Si algo nos enseña la historia de Jay Sorensen y su Java Jacket es que, para conseguir crear un negocio millonario, es necesario se ambicioso y “echarle morro” en algún momento. Siguiendo esta línea, el emprendedor decidió empezar a presentando su producto a la compañía de cafeterías más famosa del mundo: Starbucks.
UN NEGOCIO MILLONARIO REQUIERE UNA GRAN AMBICIÓN
Sin embargo, la negociación no salió bien. Starbucks quería comprar la licencia total del producto, mientras que Sorensen solo quería vender el derecho de fabricación del mismo. Así, el emprendedor salió por la puerta trasera, mientras que la compañía comenzó a fabricar sus propias fundas de café. En definitiva, todo un fracaso. Ante esta situación, Sorensen acudió a otra gran cadena de cafeterías, Coffee People y consiguió lo que buscaba: un gran contrato que le permitiera hacer de su invento un negocio millonario. Pero la historia no acaba aquí. Con el dinero que obtuvo, reinvirtió en su empresa y alquiló un stand en el Coffee Fest, un evento de exposición de cafeterías que se celebraba en Seattle. Allí, Sorensen logró cautivar a su público y firmó más acuerdos comerciales.