EL CONSEJO DE LOS EXPERTOS
La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo y debemos tenerlo presente en el actual contexto de emergencia medioambiental. Se necesitan programas que formen personas capaces de hacer frente a los desafíos urgentes en torno al cambio climático, la energía y la sostenibilidad.
En un campo tan amplio, se hace falta mucho conocimiento técnico, en constante evolución, así como una base sólida sobre políticas globales, iniciativas y normativas relacionadas para avanzar en conjunto en la misma dirección y con la Agenda 2030 como hoja de ruta. Pero esta formación requiere además de una pedagogía que aborde didácticas, estrategias y herramientas que permitan profundizar en el vínculo con el medio ambiente, concienciando sobre el valor de nuestro entorno para una toma de decisiones responsable.
Estos son objetivos claros y un reto apasionante que afronta el sector educativo a todos los niveles. La verdadera pedagogía verde debe ejercer un liderazgo inspirador para la acción.
CRISTINA REY MARTÍNEZ
Directora Técnica de Programas de Sostenibilidad de EOI
Ahora más que nunca tenemos la obligación moral y la necesidad vital de incorporar conciencia ambiental en todos los programas formativos. Encontramos en la Geografía (sí, con mayúscula) la ciencia/disciplina que abarca todos estos conceptos, sensibilidades y valores. Su presencia en la educación se muestra necesaria desde las edades más tempranas y se extiende hasta la formación de profesionales del sector ambiental, territorial y geoespacial.
Igual que pasa con las diferentes fases del ciclo del agua, los conceptos ligados al cambio climático, la energía o la sostenibilidad se encuentran interrelacionados.
La energía y la forma en la que la producimos y consumimos, es uno de los factores clave de la sostenibilidad ambiental y todo ello afecta al proceso que estamos viviendo con el cambio climático. La concienciación social es uno de los aspectos más complicados de llevar a cabo debido a la proliferación de posturas negacionistas y la mejor forma de atajar esta lacra es mediante la educación y la formación.
LUIS QUESADA MUELAS
Director de Geoinnova Formación en la Asociación Geoinnova
Los programas formativos en pedagogías verdes no solo se plantean hoy en día a nivel de especialización científica. Cada vez es más necesaria la incorporación de la sostenibilidad en cualquier ámbito profesional como una cuestión transversal al igual que sucede con la digitalización. Desde IDEL, como consultora especializada en Fondos Europeos, destacamos la oportunidad la transición verde: en los fondos europeos (el PRTR) de los 70.000M€ para el período 20212023 se establece que el 40% de las actuaciones deberán contribuir a mitigar el cambio climático y a la descarbonización de la economía. En los próximos años se realizarán inversiones que presentan yacimientos de empleo importantes en transformación ambiental, conservación de ecosistemas y su biodiversidad, preservación del litoral y los recursos hídricos, despliegue de energías renovables y hoja de ruta del hidrógeno renovable. Pero además el 100% de las inversiones debe respetar el denominado “filtro verde”: es decir no deben provocar daño al medio ambiente.
CARMEN RODRÍGUEZ
Directora de formación de IDEL
Tras la hoja de ruta de la UE con el Pacto Verde 2050 y Agenda ODS 2030, parece razonable que los nuevos programas formativos deban incluir una cierta orientación curricular que permita acelerar la transición hacia una Europa más sostenible e inteligente.
En el entorno universitario, el cambio climático y la sostenibilidad pueden abordarse incluyendo el análisis de la huella de carbono en las distintas actividades propias de cada materia de especialización. Los proyectos de asignatura, los estudios de mercado, el análisis de la producción e, incluso, la movilidad dentro del campus o las prácticas en empresa pueden también evaluarse desde una perspectiva ambiental y sostenible. Cuando se realiza una actividad, un estudio o un proyecto, cuantificar el consumo de recursos, la generación de residuos, el balance energético u otros aspectos ambientales, supone poner de manifiesto la importancia de la sostenibilidad y el fomento de la necesaria calidad de vida.
Los profesionales deben estar sensibilizados con la gestión ambiental de su sector.
TOMÁS GARCÍA MARTÍN
Profesor del Grado en Transporte y Logística de la UCJC