ALICIA FOS GARRIDO y ELENA COSTA BARBERÀ
La nueva reforma de cotización de los autónomos conseguirá ajustar las cuotas en base a los rendimientos netos anuales, lo que implica que aquellos que ganan más contribuirán con importes más elevados.
Aquellos autónomos que tienen una base de cotización inferior al mínimo en 2022, se beneficiaran especialmente de la nueva reforma, sin embargo, para el resto de tramos, el primer año implicará un aumento muy significativo de las cuotas, lo que les perjudicará. Así como a todos los nuevos autónomos que empiezan con la tarifa plana, ya que también se incrementa en 20 euros mensuales, de los 60 a los 80 euros.
El periodo de transición está planificado para que tenga una duración de nueve años, será largo y con cambios anuales, pero las consecuencias finales serán que cada vez las diferencias de importe de los tramos serán más elevadas generando mayor impacto.
Esta reforma nos acerca más al sistema europeo, pues la mayoría de estos países ya hace años que tienen sistemas de cotización variables en función de los ingresos, un sistema más igualitario.
Adicionalmente se trata de un sistema que se adapta a la nuestra realidad actual, en primer lugar, flexibilizando el ajuste de las cuotas hasta seis veces al año, y en segundo lugar, pudiéndolo hacer fácilmente a través de la nueva aplicación Import@ss.
Esto es un progreso relevante para agilizar la gestión de los autónomos.
Es recomendable hacer una previsión bien ajustada de los rendimientos netos a inicio de año e ir revisando en base a la evolución de la actividad durante el ejercicio para no tener que ajustar a final del año el importe diferencial de las cuotas, especialmente en aquellos casos en que se han hecho aportaciones inferiores al correspondiente tramo.