EL FINAL DE LOS MEDICOS SÁDICOS
Rascher y su esposa murieron en abril de 1945. Himmler ordenó su fusilamiento porque no confiaba en su silencio y temía que pudieran facilitar a los aliados información confidencial delicada. De hecho, un año antes, el matrimonio había sido encarcelado por hacer negocio ilegal con niños. Otra de las tétricas costumbres de los Rascher consistió en regalar a los colegas bolsos, sillas y pantalones de montar fabricados con piel humana extraída a los reclusos.