La Razón (Madrid) - Especiales
Un aprendizaje diferente con nuevas tecnologías
La educación online ha experimentado un notable crecimiento debido a la innovación en el ámbito educativo
LasLas aulas de los centros educativos han evolucionado y la tecnología se ha convertido en una importante herramienta en la formación. Las plataformas y aplicaciones digitales han ido sustituyendo a los medios tradicionales de impartir clase: desde el clásico proyector, a la pizarra digital, o los, ahora indispensables, ordenadores y dispositivos electrónicos. Todo ello como consecuencia de la relevancia y el impacto de la tecnología en la sociedad, que ha determinado la implementación de políticas educativas dirigidas a la integración de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) en las aulas de los países desarrollados. A todo ello, se le suma el verdadero reto que ha supuesto la pandemia en el ámbito educativo. Sin embargo, la Covid-19 se ha convertido en una oportunidad para la implementación de infraestructuras y herramientas digitales y el desarrollo de habilidades. Nos enfrentamos a un cambio en la forma de enseñar y de aprender que se adapta al entorno tecnológico.
La formación debe responder a las demandas empresariales, para adentrarse en la realidad del mundo laboral y optar por más oportunidades de empleabilidad. Con ese objetivo, los centros de enseñanza deben estar en constante evolución, añadiendo conceptos y elementos al aprendizaje.
La educación online ha experimentado un notable crecimiento en el siglo XXI. Hoy en día, pese a permitir la ubicuidad y la distancia física entre el alumnado y los docentes, es un canal participativo y bidireccional, donde los estudiantes estudiantes se implican produciendo sus propios contenidos y publicándolos. El ordenador, la tablet y el móvil se han convertido en herramientas donde consultar información a través de la web está al alcance de la mano, por ello, la UNESCO sostiene la efectividad de regular el empleo de la telefonía móvil con fines pedagógicos. Asimismo, el modo de concebir los videojuegos por la sociedad ha evolucionado significativamente, pasando de un pasatiempo a una herramienta educativa. Los juegos en 3D incrementan un 12% más las capacidades de memoria que los de 2D, así como la lógica, la concentración, el enfoque y la planificación, además de desarrollar la coordinación, la motricidad y la orientación espacial.
En los últimos años, el e-Learning una modalidad formativa a distancia o sempresencial, ha sido elegida por aquellos que deciden autogestionar su aprendizaje, ya que desaparecen las barreras espaciotemporales y permiten una formación flexible donde el alumno es el centro de los procesos de enseñanza y los contenidos están continuamente actualizados, siempre con ayuda de tutores y compañeros a través de internet. En España hubo un incremento del 122% tras notificar la OMS la pandemia.
La realidad virtual es una de las innovaciones tecnológicas que más éxito ha tenido en los últimos años. La percepción visual del entorno y los objetos crea en el usuario la sensación de estar inmerso en ello, por lo que en el sector educativo permite vivir en primera persona la realidad y las explicaciones de los libros a través de un aprendizaje más atractivo e interactivo. Sin embargo, la inteligencia artificial es la herramienta más novedosa que apunta a la personalización del aprendizaje y a una mayor interacción entre profesores y alumnos.
Las impresoras 3D son una apuesta al futuro y a la posibilidad de materializar los conceptos estudiados en un objeto real en tres dimensiones, fomentando la creatividad y el interés del estudiante.
Estas nuevas herramientas permiten a los alumnos disfrutar de experiencias y alternativas que proporcionan un mayor conocimiento de forma más dinámica. Además, los expertos señalan los beneficios para el camino hacia la transformación. Existe mayor motivación de los alumnos en el aprendizaje con el uso de la tecnología, pues al ser nativos digitales se sienten familiarizados con el lenguaje. Al mismo tiempo, es una forma atractiva que les hace partícipes en la enseñanza, favoreciendo la interacción entre los estudiantes y, a su vez, con el profesorado, tanto a la hora de comunicarse y como para aportar conocimientos. Los profesionales indican que se fomenta el trabajo en equipo, por lo que se impulsan valores como la cooperación y se incrementa la creatividad.
Sin embargo, los expertos señalan la importancia de una formación en la introducción y el avance de la tecnología, tanto a los alumnos como a los docentes, así como adaptar los espacios a las necesidades de los formatos de enseñanza. De modo que los centros formativos ofrezcan itinerarios actualizados, dedicados a diferentes niveles y situaciones, donde el rendimiento y los resultados de los estudiantes sean más efectivos, proporcionando un entorno cercano al mundo laboral.
La formación debe reponder a las demandas empresariales y la realidad laboral