TODOS SOMOS ‘EL NOTA’.

“¡Cállate la puta boca, Donny!”. “¡No estás en tu elemento!”. Si le dices a alguien estas dos frases y no sabe de qué le estás hablando, no es de far. Porque quien no haya visto El gran Lebowski (que cumple 20 años) no es de far. Esta es una de las (tantas) obras maestras de los hermanos Coen, con la singularidad de que el trío formado por Jeff Bridges, John Goodman y Steve Buscemi es la mejor conjunción de actores-guion que se recuerda en estas dos décadas. Y sí, el guion es muy bueno, incluso con las 292 ocasiones en las que se dice “joder”, “jodido” o cualquier otra traducción española para “fuck” o“fucking”. Todos somos el Nota, pero también somos un poco Walter (Goodman) y un mucho Donny (Buscemi). Ahí está la magia de El gran Lebowski, en que siendo tipos vagos, fumetas, supremacistas, bobos e idiotas, son de los nuestros. Les queremos porque somos nosotros, porque tienen más defectos que virtudes, porque la cagan a cada paso que dan pero… son buena gente. Y a la buena gente, aunque sea tan estúpida como para esparcir las cenizas de un amigo muerto contra el viento, hay que quererla.