DISEÑADOR DE ALMAS
EL CANARIO EDUARDO RAMÊREZ, GENERAL MANAGER DE DISEÑO EN HYUNDAI EUROPA, NOS CUENTA QUÉ HAY DETRÁS DEL PROYECTO DE UN AUTOMÓVIL Y CUÁL ES SU SECRETO PARA CREAR VERDADEROS SUPERVENTAS
Charlar con Eduardo Ramírez (Las Palmas, 1968) es toda una delicia. A pesar de llevar diecisiete años viviendo en Alemania, donde está el cuartel general de Hyundai Europa, y otros tantos formándose en Inglaterra (estudió en la Universidad de Coventry y en el Royal College of Art de Londres), su hipnótico carácter canario sigue intacto.
¿Hay algo del paisaje y el espíritu de tu tierra en tus diseños?, le pregunto para abrir boca. “La naturaleza es espectacular en Canarias y eso inspira la contemplación, que es importantísima para mi trabajo”, asegura. Rodeado de toda esa belleza, el Eduardo niño supo enseguida qué quería ser de mayor: “En mi familia había mucha afición por el arte y a mí me gustaba dibujar coches. Pronto caí en la cuenta de que alguien debía dibujar los de verdad, así que ¿por qué no intentarlo? [sonríe]”.
Su primer encargo profesional fue una llanta. “En los equipos de diseño se empieza con piezas pequeñas.
¡Aún recuerdo la alegría que me produjo verla en la calle!”, dice.
La mayor parte del trabajo de un diseñador transcurre frente a una mesa de dibujoy un ordenador y no es hasta que salen las primeras unidades cuando ve el resultado real. “Sí.
Hacemos un boceto, lo pasamos a un entorno digital y después hacemos moldes reales. Pero siempre en un estudio, con luz artificial... Y cuando sale a la calle, el metal, los colores, los reflejos son diferentes. Ahora hay
herramientas que nos permiten ver gran parte de los cambios, pero ninguna que iguale la sensación de ver un coche en movimiento”, explica.
Sobre el peso del diseño en el éxito de un modelo, asegura: “Cada vez que se inicia un proyecto nuevo, es muy habitual que me digan que su principal motivo de venta será el diseño.Y es que en el diseño de productos racionales, como una herramienta, lo más importante es que funcionen sin pegas. Pero en el de uno no racional, como un coche, cuentan la experiencia al volante, su aspecto exterior o si la persona se siente identificada con él. Es un producto muy complejo al que el diseño dota de alma”.
DEL COUPÉ AL PROPERCY
De su lápiz, aunque él se empeña en reivindicar la autoría de su equipo en todo lo que hace (lo que le honra), han salido modelos como el i10, elTucson o el Propercy, un espectacular concept car presentado en junio. “Yo prefiero seguir mi intuición. Alguien tiene que dar el siguiente paso y hacer cosas diferentes. Por eso me gusta trabajar para Hyundai, porque es una empresa atrevida a la que no le da miedo arriesgar y romper moldes”, afirma. ¿Ejemplos? El Nexus, el único coche en el mercado con pila de combustible, o el mítico Coupé. “Ese es un buen ejemplo. Fue un modelo honesto y atrevido, que llevó la emoción de un coche deportivo a un segmento más asequible. Recientemente, el Fastback del i30 también ha sido una carrocería nacida de la intuición, que no estaba prevista y que ha tenido mucho éxito”.
¿Y en el futuro? “Estamos en una época de grandes cambios: de paso de motores de combustión a eléctricos; de conducción manual a autónoma… Nuestra labor, la de los diseñadores, es asegurarnos de que esos coches sigan teniendo alma y carácter”, termina.
“Yo prefiero seguir mi intuición. Alguien tiene que dar el siguiente paso y hacer cosas diferentes”